El sorprendente coche se someterá a un control técnico en unas semanas. El jubilado con “manos de oro” ya ha tenido varias ofertas de compra, pero las rechaza sistemáticamente.
¿Qué coleccionista de autos no ha soñado alguna vez con un dos caballos?, un modelo mítico que un ebanista francés jubilado ha tardado seis años en construir. Este vehículo, único en el mundo, fabricado totalmente de madera pasará su primer control técnico para circular por carretera.
Con la barba amarillenta por el cigarrillo, Michel Robillard sacude con la mano viruta de madera de su suéter de lana. Sus ojos azules se iluminan cuando acaricia la madera delicadamente lijada de sus maquetas.
A los 14 años, con su diploma de ebanista en el bolsillo, Robillard comenzó haciendo maquetas hasta pasarse a modelos de tamaño real con un sueño en mente: construir un vehículo de madera a escala 1 con el que pudiera salir a pasear este verano (boreal).
Este desafío se lo impuso en 2011. Seis años más tarde terminó con éxito la construcción de esta pieza única en el mundo, la copia de un Citroën dos caballos de 1953.
Para realizar esta obra de arte utilizó varios tipos de madera: peral para la carcasa, manzano para el capó, nogal para los costados y el volante, cerezo para las puertas y el maletero, y olmo para el tablero de mando.
El coche fue fabricado con piezas originales. “Trabajé con un chasís de Dyane 6 de 1966 y un motor 3 CV porque la madera es más pesada que la carrocería original. Lo aislé bajo el capó colocando una protección térmica”, explica.
“Las llantas y los faros son también originales, pero las parrillas son de madera, al igual que los asientos sobre los cuales coloqué cojines”, añade.