Panamá y Costa Rica condenaron este martes la detención de los opositores venezolanos Leopoldo López y Antonio Ledezma, una acción que, según los países centroamericanos, aumentan la polarización y dificultan una salida pacífica a la crisis en Venezuela
“El Gobierno de la República de Panamá condena la detención en Venezuela de los líderes opositores Leopoldo López y Antonio Ledezma”, señaló la cancillería en un comunicado.
“Esta acción demuestra una vez más que el Gobierno que dirige el Presidente Nicolás Maduro persiste en ir por la vía de la confrontación, en lugar de un diálogo serio y sincero”, añade la nota.
La canciller panameña, Isabel de Saint Malo, indicó que su país considera retirar al embajador en Venezuela como respuesta a la situación en ese país.
“Es un tema que hemos estado valorando con el presidente (Juan Carlos Varela) a lo largo de muchos meses y si no lo hemos hecho (retirar al embajador) hasta ahora es cuidando los intereses de Panamá”, añadió la canciller.
En tanto, la cancillería costarricense manifestó “su profundo rechazo a estas acciones que continúan minando los vestigios de la democracia en la República Bolivariana de Venezuela. Estos actos aumentan la desconfianza en el gobierno de ese país y alejan la posibilidad de encontrar una solución pacífica y negociada a la grave situación que allí se vive”.
Los dos países insistieron en su rechazo a las acciones reñidas con la democracia y los derechos humanos, como la persecución de opositores y la represión de voces críticas al gobierno de Nicolás Maduro.
El presidente panameño Varela escribió en su cuenta de Twitter que “el Pdte Maduro insiste en la confrontación con los traslados de López y Ledezma; nuestro total rechazo y condena a esas acciones”.