En los ataques, los más mortíferos cometidos en suelo estadounidense, murieron 2.997 personas. Cada año son recordadas las víctimas. El presidente Donald Trump se refirió duramente a los terroristas a los que aseguró que nunca encontrarán un efugio para lanzar ataques contra su país
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, homenajeó el lunes a las víctimas de los atentados del 11 de septiembre de 2001, y afirmó que el país no olvidará jamás lo ocurrido y no se dejará intimidar por “terroristas”.
“El horror y la angustia de aquella jornada sombría están grabadas en nuestra memoria para siempre”, dijo durante una ceremonia en el Pentágono, donde hace 16 años se estrelló uno de los cuatro aviones comerciales secuestrados por militantes de la red yihadista Al Qaida.
En la visión de Trump, los atentados de ese día, que traumatizaron a Estados Unidos y motivaron luego las invasiones de Afganistán (2001) e Irak (2003), cambiaron al mundo, pero también al país.
“Estados Unidos no será intimidado”, dijo el presidente, advirtiendo a “los terroristas que han tratado de quebrar nuestra determinación”.
“Haremos que no encuentren nunca un refugio para lanzar ataques contra nuestro país. No encontrarán ningún lugar donde esconderse en el planeta”, aseveró.
Poco antes del acto en el Pentágono, Trump y su esposa Melania observaron un minuto de silencio en los jardines de la Casa Blanca.
Como ocurre cada año desde los atentados, la Presidencia estadounidense recuerda a las 08H46 local (12H46 GMT), el exacto momento en que el primero de los aviones impactó contra una de las torres del World Trade Center, en Nueva York.
Simultáneamente, se realizó un minuto de silencio en el predio donde se encontraban los edificios del World Trade Center y ahora se alza el rascacielos bautizado Freedom Tower.
– Ceremonia en la Zona Cero –
En la llamada Zona Cero, donde estaban los fundamentos de las torres destruidas, se encuentran ahora dos enormes fuentes de granito que recuerdan a las víctimas del atentado.
Este lunes, participaron de la ceremonia el alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, y su antecesor en el cargo, Michael Bloomberg.
Como cada año, turnándose en pares, familiares de las víctimas procedieron a la lectura de los nombres de los casi 3.000 muertos.
Esa lectura fue interrumpida para un nuevo minuto de silencio a las 09H05 local (13H09 GMT), en referencia al momento en que el segundo avión utilizado en el atentado hizo impacto contra el edificio.
Un equipo del Cuerpo de Bomberos de Nueva York también rindió homenaje a los 343 camaradas que perdieron la vida en aquella jornada.
En total, el 11 de septiembre de 2001 fueron secuestrados cuatro aviones por militantes de Al Qaida que fueron usados para atacar el World Trade Center y el Pentágono. El cuarto aparato se estrelló en un campo en Shanksville, Pensilvania.
En los ataques, los más mortíferos cometidos en suelo estadounidense, murieron 2.997 personas, hundiendo a Estados Unidos en una serie de guerras contra grupos islámicos.