Más de veinte años después de la Conferencia Mundial de Mujeres de Pekín, celebrada en 1995, y la violencia sigue siendo un azote presente en todas las regiones del mundo
La ONU consagró este sábado 25 de noviembre como el Día Internacional de Eliminación de la Violencia contra la Mujer, un flagelo que sufren todos los países.
Las Naciones Unidas declaran la violencia contra las mujeres y niñas como la más extendida violación de derechos humanos y uno de los principales obstáculos para el desarrollo y la paz.
Se trata de una realidad para una de cada tres mujeres en el mundo y, en algunos países, para dos de cada tres mujeres. La violencia representa un obstáculo persistente para el desarrollo humano y económico y para la puesta en marcha de los objetivos de desarrollo sostenible.
Nelva Reyes, activista en pro de los derechos de las mujeres, señaló que en Panamá se deben buscar medidas para evitar la violencia contra el genero femenino; al mismo tiempo considera que el estado debe destinar recursos para campañas e impulsar leyes que prevean la violencia y así evitar los altos niveles de femicidio.
Grupos panameños como el Kolectivo, realizaron representaciones públicas para concienciar a la población sobre la vulnerabilidad de la mujer y la importancia de su rol en la sociedad actual.