Al menos 133 personas murieron durante el paso de la tormenta tropical Tembin que azota desde el viernes el sur de Filipinas, afectando principalmente a la isla de Mindanao, y los servicios de emergencias seguían buscando el sábado a decenas de desaparecidos
El balance no deja de aumentar. Las últimas cifras de la policía incluyen 36 víctimas cuyos cuerpos fueron recuperados el sábado de las aguas del río Salong, en Mindanao.
Rando Salvacion, un responsable de la policía de la ciudad de Sapad, declaró a la AFP que los cuerpos rescatados en Salong provenían de la localidad de Salvador, río arriba.
Las autoridades locales indicaron por su parte haber recuperado otros 17 cuerpos, más río arriba.
Sapad y Salvador se sitúan en la provincia de Lanao del Norte, en el noroeste de la isla, una de las más afectadas por Tembin.
“Se alertó sobradamente a la población. Pero como los tifones son poco comunes aquí, los vecinos no nos tomaron en serio”, se lamenta el responsable de la policía de Salvador, Wilson Mislores.
Una veintena de tifones y tormentas golpean cada año Filipinas, pero Mindanao, la gran isla del sur de unos 20 millones de habitantes, generalmente se salva.
Más de 120.000 habitantes de la isla tuvieron que huir de sus hogares.
Según la policía, 19 personas fallecieron también en el pueblo montañoso de Dalama, cerca de la ciudad de Tubod.
“El río comenzó a crecer y la mayoría de las casas [de Dalama] fueron arrasadas. El pueblo ya no existe”, declaró por teléfono a la AFP Gerry Parami, de la policía de Tubod.
Policías, soldados y voluntarios trabajan con ayuda de palas para intentar encontrar cuerpos sepultados por el lodo y los escombros en este pueblo agrícola de unas 2.000 personas, añadió Gerry Parami.