Además de Kuczynski, el exmandatario Alan García y la líder del partido fujimorista Fuerza Popular, Keiko Fujimori, se pronunciaron para defender su inocencia frente a las acusaciones que también involucran a los expresidentes Alejandro Toledo y Ollanta Humala y a la exalcaldesa de Lima, Susana Villarán
Los principales líderes políticos de Perú, incluido el presidente, Pedro Pablo Kuczynski, negaron haber recibido dinero de la constructora brasileña Odebrecht para financiar sus campañas electorales, como lo afirmó el miércoles el exdirector de la empresa en Perú, Jorge Barata, ante los fiscales peruanos.
Además de Kuczynski, el exmandatario Alan García y la líder del partido fujimorista Fuerza Popular, Keiko Fujimori, se pronunciaron para defender su inocencia frente a las acusaciones que también involucran a los expresidentes Alejandro Toledo y Ollanta Humala y a la exalcaldesa de Lima, Susana Villarán.
Barata, parte del grupo de los 77 ejecutivos de Odebrecht, en un intercambio por reducir sus condenas, delató en Brasil la forma en que operaba la compañía. El exejecutivo habló con los fiscales peruanos como colaborador de las investigaciones de corrupción. Si el exempresario ofrece falso testimonio, se arriesga a perder todos los beneficios de la delación premiada.
Según han explicado los ejecutivos de Odebrecht, la constructora operaba aportando a las finanzas de todas las candidaturas que consideraban con oportunidades de hacerse con la Presidencia. En el caso de la alcaldía de Lima, se trató de un referéndum revocatorio y los supuestos aportes fueron para mantener en su cargo a Villarán, con quien ya se habían avanzado proyectos de obra.
Suerte de expresidentes peruanos en manos de la justicia
La Sala Penal Nacional ordenó esta semana que Fujimori, de 79 años, sea juzgado por la matanza de Pativilca de 1992, lo que podría llevarlo nuevamente a prisión tras conseguir en diciembre un indulto presidencial mientras cumplía una condena de 25 años por crímenes contra la humanidad.
Por su parte, Toledo y Humala están acusados de haber recibido dádivas de la constructora brasileña Odebrecht, que admitió haber pagado 29 millones de dólares en sobornos en Perú bajo diferentes gobiernos.
“Los políticos (peruanos) estaban confiados porque estaban acostumbrados a arreglar las cosas”, a actuar con impunidad, pero ahora las cosas están cambiando, dijo a la AFP el analista Luis Benavente, director de la consultora Vox Populi.