El técnico de Panamá, el colombiano Hernán Darío Gómez, sumará en Rusia su quinto Mundial, toda una marca para este enamorado de la Holanda de Johan Cruyff que hizo creer al equipo canalero en sus posibilidades de clasificar a una Copa del Mundo
De mirada analítica, figura rechoncha y explosivo como una ópera de Richard Wagner, el ‘Bolillo’ Gómez es el responsable de llevar a Panamá a su primer Mundial, donde espera que su equipo haga un papel “digno”, pese a ser la cenicienta de la competición.
Sin embargo, no se cansa de repetir que su equipo va principalmente a Rusia a “crecer” y “aprender”.
“El Bolillo es una persona que ama mucho el fútbol y lo vive. Tal vez no sea como los técnicos de ahora, pero es un zorro y se las conoce todas. Nadie le puede echar cuento”, dijo el periodista Campo Elías, del diario La Prensa.
“Logró adaptarse a lo que tenía aquí, lo que no era tan fácil, en un país como éste, que es más béisbol y boxeo que fútbol”, declaró el gerente de deportes de la coorporación Medcom, David Samudio.
Entre las claves de la clasificación están la motivación que imprimió a los jugadores y a la unión del vestuario, con algunos jugadores que acumulan hasta cuatro eliminatorias mundialistas.
“En la eliminatoria pasada Panamá no era una familia”, afirmó Gómez en el documental “87 minutos”, que resume la clasificación canalera.
La selección tenía “muy buenos jugadores” pero “no se portaron bien, no hicieron las cosas bien para ir a un Mundial” y ahora “la vida les dio la oportunidad”, añadió Gómez.