Con sus autos rápidos, pieles y fedoras, los héroes del “blaxploitation”, el movimiento de cine de explotación negra de la década de 1970, vuelven a la gran pantalla en medio de una tendencia nostálgica de Hollywood de volver al pasado
Este subgénero, derivado del llamado cine de explotación, es visto por unos como una celebración de un Estados Unidos rico o como el regreso de un estereotipo negativo.
Esta semana llegó a la cartelera estadounidense “Superfly”, un remake del clásico “Super Fly” de 1972, considerado un hito de la cultura negra y tal vez uno de los filmes más representativos del “blackploitation”.
Para el año que viene está prevista una nueva versión de “Shaft” con Samuel L. Jackson, mientras que Warner Bros planea hacer un remake de “Cleopatra Jones” (1973) y Hulu, uno de “Foxy Brown” (“Escape sangriento”).
“Algunas de mis películas favoritas son remakes”, dijo el veterano director de videoclips y ahora cineasta Director X en una conferencia en Los Ángeles el fin de semana.
“‘Caracortada’ es un remake, ‘Invasion of the Body Snatchers’ es un remake. Yo quería tener la posibilidad de hacer un gran remake de un filme clásico”, añadió.
Estrenada el 4 de agosto de 1972, “Super Fly” cuenta la historia del narcotraficante de Harlem Youngblood Priest (Ron O’Neal) tratando de concretar un último gran trabajo antes de retirarse de la vida criminal.