El lujoso hotel en Panamá que pertenecía a la compañía vinculada al presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, será administrado por la cadena hotelera Marriott International, en medio de disputas comerciales entre los antiguos y los nuevos dueños
La empresa Ithaca Capital, actual administradora del exclusivo complejo hotelero ubicado frente a la bahía de Ciudad de Panamá, anunció este miércoles en un comunicado que a partir de septiembre de 2018 las instalaciones serán administradas por Marriott tras llegar a “acuerdos”.
“Ithaca Capital, Hotel ToC y Marriott International firmaron acuerdos para cambiar la marca del hotel como JW Marriott, bajo un contrato de administración a largo plazo con Marriott International”, dice la nota.
“Estamos encantados de que nuestro hotel opere como JW Marriott, y creemos que esta asociación, junto con un equipo talentoso y servicios espectaculares, será un éxito”, manifestó Orestes Fintiklis, empresario chipriota y socio gerente de Ithaca Capital.
La torre con forma de vela de navegación tiene 72 pisos y más de 1.000 habitaciones, en un complejo lujoso que incluye apartamentos, casino, tiendas, spa y una pequeña playa privada.
El hotel y la mayoría de apartamentos fueron vendidos el año pasado a Fintiklis.
Como parte del acuerdo de venta, la empresa de Trump seguiría administrando el hotel, pero Fintiklis la expulsó tras desavenencias que han terminado en tribunales estadounidenses.
Además, cambió el nombre del complejo de Trump Ocean Club International Hotel a Bahía Grand Panamá.
El lujoso hotel fue inaugurado en 2011 por Trump en compañía del entonces presidente panameño Ricardo Martinelli, actualmente encarcelado preventivamente por cargos de espionaje a opositores.
La torre de 284 metros de altura y un costo de 430 millones de dólares, fue presentada en su momento como el edificio más alto de América Latina.
Los letrados de Trump pidieron en una misiva al presidente de Panamá, Juan Carlos Varela, que utilizara “su influencia” para resolver el caso, pero el gobierno panameño descartó interceder en el contencioso.
Aunque la Organización Trump pertenece al presidente estadounidense, éste cedió el control todas sus empresas a sus hijos poco antes de llegar a la Casa Blanca.