Un robot con inteligencia artificial y forma de pelota, apodado “cerebro volador” y entrenado para interactuar con un astronauta alemán, despegó este viernes hacia la Estación Espacial Internacional (EEI) a bordo de la nave Dragon, de la compañía SpaceX
Una mano de repuesto para el brazo robótico de la estación, un experimento para medir el estrés de las plantas en el espacio y un estudio de un nuevo tratamiento contra el cáncer también viajan en el Falcon 9, que despegó a las 05H42 horas de Florida (09H42 GMT) desde Cabo Cañaveral, en la decimoquinta misión de aprovisionamiento de SpaceX.
La cápsula Dragon, integrada al cohete Falcon 9, lleva 2.700 kilos de material y es parte del contrato que SpaceX suscribió con la NASA por unos 1.600 millones de dólares.
La primera fase del lanzamiento transcurrió sin inconvenientes hasta que Dragon se separó del cohete, luego de unos diez minutos, y desplegó sus paneles solares. El lunes 2 de julio debe alcanzar la EEI, a 400 km sobre el nivel del mar.
No es el primer viaje de este cohete ni de esta nave de carga: en 2016 Dragon fue lanzada al espacio, y hace dos meses este mismo cohete se utilizó para poner en órbita un satélite de la NASA.