Concolón del 14 de julio de 2018

Culebrón    

Parece que alrededor de la visita de una señora de buen ver, oriunda  de la vecina tierra del café, al Renacer; se teje toda una trama de historietas. Resulta que la paisana de Juan Valdez, sí  tuvo un romance con el abogado Carlos Herrera Morán,  abogado de un querellante en el Caso Pinchazos, pero él dice que de ese fuego ya ni cenizas quedan. Asegura que hasta donde él sabe, la dama misteriosa es muy amiga de doña Marta y le llevaba un encargo a Martinelli. Preguntita ¿Si ya no están relacionados cómo sabe todo eso?

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Poco antes que Herrera Morán diera su versión, los abogados de “Loconelli” salieron al paso de los rumores de que la visita era una “atención prepago”, para su defendido, diciendo que en los registros nada hay relacionado al expresidente y esa visita, que por cierto llegó en compañía de un abogado que no está vinculado al Caso Pinchazos. Pero, Tinín supo además que cuando “la visita” llegó, “Loconelli” estaba en el Santo Tomás. Así  que quedan dos caminos,  o todo fue muy mal coordinado, o la visita era para otro y hay gente escondida detrás de la cortina de humo.

Detalle de tocayos

Más bien una calamidad. Un comunicado de la flamante Secretaría de Comunicación del Estado que pretendía informar sobre la designación del nuevo gerente de Tocumen S.A. le realizó el sueño al mopri Juan-k, cuando en un párrafo dicen el presidente Juan Carlos Navarro. Óyeme Tinín ¿En qué estarían pensando?…

Protesta a domicilio

El grupo que realizó la vigiia ayer contra el alza de la energía, aprovechó para protestar en la acera frente a la casa del Príncipe del Miramar. El señor como que se olía algo, porque minutos antes estaba anunciando la suspensión de las alzas en las tarifas y la decisión que el gobierno asumirá esos costos.

El Plan

En ese mismo anuncio, el Príncipe del Miramar enfocó los reflectores a la dispensa de 300 millones de dólares que ha solicitado a la Asamblea como la llave que necesita abrir para pagar la cuenta de luz. Dice Tinín que hay un fuerte olor a “fríamente calculado” en el ambiente.

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