El flamante secretario de Estado de la Casa Blanca, es un antiguo oficial de caballería, empresario, y también fue congresista conservador.
Mike Pompeo nació el 30 de diciembre de 1963, en Orange, California. Está casado con Susan Pompeo, y tiene un hijo, Nick.
Se graduó de primero en su clase en la Academia Militar de Estados Unidos, en West Point en 1986; sirvió como Oficial de Caballería patrullando la Cortina de Acero, antes de la caída del Muro de Berlín.
También estuvo con el segundo escuadrón, séptimo de Caballería en la Cuarta División de Infantería del Ejército de EE. UU. Después de dejar el servicio activo, Pompeo se graduó de la Facultad de Derecho de Harvard.
Fundó Thayer Aerospace, donde se desempeñó como CEO durante más de una década. Más tarde, se convirtió en Presidente de Sentry International, una empresa de fabricación, distribución y servicios de equipos para yacimientos petrolíferos.
Fue congresista del 4to Distrito de Kansas. Prestó servicio en la Comisión de Inteligencia de la Cámara, así como en las comisiones de Energía y Comercio.
En 2014, Pompeo también fue nombrado miembro de la Comisión Selecta de la Cámara sobre Benghazi, para investigar los trágicos acontecimientos en Benghazi, Libia.
Fungió como su director de la CIA, donde gestionó la recopilación de inteligencia, el análisis, la acción encubierta, la contrainteligencia, y las relaciones de enlace con los servicios de inteligencia extranjeros.
¿Cómo llegó al gobierno de Trump?
El 13 de marzo de 2018, Mike Pompeo, fue nombrado como secretario de Estado de EE.UU., luego de dirigir la CIA durante un año.
Se ganó la confianza de Donald Trump, brindando los informes presidenciales diarios de seguridad nacional, y alineándose políticamente con el mandatario.
Fue así como Pompeo, reemplazó a Rex Tillerson, que estaba antes del él, frente al Departamento de Estado.
Según los reportes de prensa internacional, Pompeo comparte la línea dura de Trump respeto a Irán y Corea del Norte; y evitó contradecir directamente la insistente afirmación del presidente Trump, de que Rusia no actuó en su favor durante la campaña electoral de 2016, aunque esa fue la conclusión de la CIA.
A continuación, un breve resumen, de las posiciones más representativas en la vida política de Pompeo:
1) Guantánamo debe permanecer abierto
Mike Pompeo ha insistido en que el centro de detención de la bahía de Guantánamo, en Cuba, debe permanecer abierto, argumentando que es “la decisión correcta para la seguridad nacional de EEUU”.
De hecho, el republicano tiene en su página web fotografías de detenidos, que se encuentran en este centro penitenciario, acompañadas de la frase ‘este podría ser su vecindario’.
2) Pena de muerte para Edward Snowden
Pompeo fue uno de los políticos que defendió los programas de vigilancia de la Agencia de Seguridad Nacional de EEUU (NSA) y está dispuesto a reiniciarlos. El republicano presentó en 2015, el acta ‘Liberty Through Strength’ —libertad mediante la fuerza, en español— que busca dar a la NSA, más facilidades a la hora de conseguir datos de ciertas compañías basándose en la llamada Acta Patriótica.
En 2016, Pompeo tildó a Edward Snowden de traidor, y sugirió que debería ser condenado a pena de muerte. “Él [Snowden] debería ser traído de vuelta desde Rusia y ser procesado; creo que el mejor final sería que lo sentenciaran a la pena de muerte”, afirmó.
Pompeo formó parte del Comité que investigó el proceder de Hillary Clinton, como Secretaria de Estado, durante el asalto al consulado estadounidense en Bengasi, Libia —que acabó con la muerte de diversas personas, entre ellas el propio representante de EEUU en el lugar—. Durante aquella investigación, entre otras cosas, el republicano afirmó que Clinton “falló a la hora de liderar”.
4) Boicot al Obamacare
El Obamacare, la reforma sanitaria impulsada por el presidente Obama, fue fuertemente criticado por Pompeo en una columna escrita por él en septiembre de 2013. El congresista tildó de “desastre” la reforma, e instó a los demócratas a unirse a los republicanos, y revertir este cambio legislativo.
“Esta ley incrementa las primas, disminuye la calidad de la salud, aumenta los impuestos, y pone en peligro la salud de los norteamericanos, a quienes se les prometió que no la perderían”, declaró en ese entonces, Pompeo.
5) Postura contra Corea del Norte
En octubre del año pasado, Pompeo apoyó la disposición de Trump a recurrir al uso de la fuerza para evitar que el líder norcoreano “tenga capacidad de mantener bajo amenaza a EE.UU”.
Poco después, en enero de este año, el entonces director de la CIA ya advertía que un ataque nuclear norcoreano contra EE.UU. podía ocurrir en “un puñado de meses”.
6) La amenaza rusa
Pompeo ha insistido en la necesidad de tomar medidas de respuesta respecto a la supuesta amenaza rusa. “Debemos resistir, derrotarla, trabajar para que la derrota sea lo más dolorosa posible para ellos”, afirmó en julio de este año.
En varias ocasiones ha acusado a Rusia de “complicarle la vida” a EE.UU. y ha minimizado el papel de Moscú, en la lucha contra el terrorismo en Siria.
7) Sobre China
Entre otras amenazas para la seguridad nacional de EE.UU., el secretario de Estado ha destacado el papel de China con su economía en expansión, y su poder militar en crecimiento, que, según él, tiene como objetivo confrontar a Washington.
De acuerdo con Pompeo, Pekín tiene posibilidades de representar una fuerte competencia para Estados Unidos, a mediano y largo plazo.
8) Acuerdo Nuclear con Irán
En todo el contexto del gobierno estadounidense, es una de las personas más críticas con respecto al histórico Acuerdo Nuclear con Irán.
Ha afirmado que la República Islámica de Irán, es un “Estado nacional poderoso”, que sigue siendo “el mayor Estado patrocinador del terrorismo en el mundo”, y “representa un desafío mayor para EE.UU. en el Oriente Medio a largo plazo”.