Al menos nueve personas fallecieron y miles debieron evacuar por los incendios que arrasan este sábado al estado de California, incluyedo zonas de Malibú, donde viven varias estrellas de Hollywood.
Los muertos se produjeron en la ciudad de Paradise, en el condado de Butte, al norte de Sacramento, capital del este estado de la costa oeste de Estados Unidos, donde se incendiaron 6.700 edificaciones, en su mayoría residencias.
El incendio de Butte, apodado “Camp Fire, el más destructivo de que se tiene registro, comenzó el jueves en la mañana, arrasó 36.400 hectáreas hasta la noche del viernes, y el Departamento de Bomberos de California (Cal Fire) apenas lo contenía en un 5%.
Otros dos incendios se registran más al sur, en el condado de Ventura, cerca de Thousand Oaks, donde un exsoldado abrió fuego en un bar el miércoles en la noche dejando 12 muertos antes de suicidarse.
“La magnitud de la destrucción que hemos visto es increíble y desgarradora”, dijo Mark Ghilarducci, director de la oficina de emergencia del gobierno del estado. “Sabemos que hay heridos y que se han perdido vidas humanas”.
El sheriff de Butte, Korey Honea, actualizó el viernes de noche el saldo de víctimas. “Es mi triste deber confirmar que tenemos ahora un total de nueve muertos”, indicó.
En tanto, decenas de personas fueron reportadas como desaparecidas.
California ha sido golpeado desde finales de 2017 por numerosos incendios especialmente violentos, que provocaron una decena de muertes.
El presidente Donald Trump no mostró simpatía por la situación del estado, mayoritariamente liberal, y al que acusa de una mala gestión forestal que propicia los incendios.
“No hay motivo para estos incendios masivos y mortales en California, excepto que la gestión forestal es muy mala”, tuiteó el mandatario el sábado.
“Cada año se otorgan miles de millones de dólares, con tantas vidas perdidas, todo por el pésimo manejo forestal. Pongan remedio a eso o no habrá más dinero federal”, agregó.