China logró llevar a cabo este jueves el primer alunizaje jamás realizado por un dispositivo espacial en la cara oculta de la Luna, anunciaron medios estatales.
El módulo de exploración Chang’e-4, que había despegado de la Tierra el 8 de diciembre, se posó sin problemas a las 10H26 hora de Pekín (02H26 GMT), informó la agencia Xinhua.
Envió una foto de la superficie lunar al satélite Queqiao, que orbita alrededor de la Luna, precisó la televisión pública CCTV.
A diferencia de la cara de la Luna más cercana a la Tierra, que está siempre girada hacia nuestro planeta, ninguna sonda ni ningún módulo se exploración se había posado jamás en la superficie del lado contrario.
La cara oculta es montañosa y accidentada, salpicada de cráteres, mientras que la faz visible dispone de numerosas superficies planas para posarse.
Uno de los mayores desafíos es lograr comunicarse con el robot lunar. Como la cara oscura de la Luna está orientada en sentido opuesto a la Tierra, no hay una “línea de visión” directa para transmitir señales, salvo que se instale un relevo.
Así, China lanzó en mayo un satélite que bautizó Queqiao, posicionado en la órbita lunar para transmitir órdenes y datos intercambiados entre la Tierra y el módulo.
El Chang’e-4 llevará a cabo estudios sobre las radiofrecuencias bajas, el cultivo de tomates en otros planetas y los recursos minerales, entre otras cosas.
Esta es la segunda vez que China envía un vehículo para explorar la superficie lunar después del Yutu (“Conejo de Jade”) en 2013, que permaneció activo durante 31 meses.