El papa Francisco manifestó este lunes su preocupación respecto al auge de los nacionalismos, que debilitan el peso de las organizaciones internacionales, durante la recepción al cuerpo diplomático acreditado ante la Santa Sede con motivo del nuevo año.
El sumo pontífice consideró que “esto es en parte debido a cierta incapacidad del sistema multilateral para ofrecer soluciones eficaces a las distintas situaciones que desde hace tiempo están pendientes de resolución, como algunos conflictos ‘congelados'”.
Además, señaló que “en particular, (esto) es también el resultado de la creciente preponderancia de poderes y grupos de interés en los organismos internacionales que imponen la propia visión e ideas, desencadenando nuevas formas de colonización ideológica, que a menudo no respetan la identidad, la dignidad y la sensibilidad de los pueblos”.
El papa argentino también hizo referencia al auge actual de los partidos populistas y nacionalistas, como ocurrió en la historia del periodo de entreguerras.
Concretamente dijo: “las tendencias populistas y nacionalistas prevalecieron sobre la acción de la Sociedad de Naciones. La reaparición de corrientes semejantes está debilitando progresivamente el sistema multilateral, con el fruto de una falta general de la confianza, una crisis de credibilidad de la política internacional y una creciente marginación de los miembros más vulnerables de la familia de las naciones”.
Francisco, quien el domingo pidió a los líderes europeos que demuestren una “solidaridad concreta” respecto a 49 migrantes bloqueados en dos barcos de oenegés en las costas de Malta, este lunes hizo otro llamamiento a gobiernos a brindar acogida a quienes han tenido que huir de la pobreza, la violencia o los desastres naturales.
“Soy consciente de que las olas migratorias de estos años han causado desconfianza y preocupación entre la población de muchos países, especialmente en Europa y América del Norte, y esto ha llevado a varios gobiernos a limitar en gran medida los flujos entrantes”, añadió.
“Las emergencias recientes –añadió– han demostrado que se necesita una respuesta común, coordinada por todos los países, sin prevenciones y respetando todas las instancias legítimas, tanto de los Estados como de los migrantes y refugiados”.
El papa viajará a comienzos de este año a dos países musulmanes, Marruecos y Emiratos Árabes Unidos (EAU).