Un grupo de investigadores japoneses anunció este lunes el próximo lanzamiento de un ensayo clínico con células madre pluripotentes inducidas (iPS) para tratar lesiones de la médula espinal.
El ensayo, llevado a cabo por un equipo de la universidad Keio de Tokio y aprobado por las autoridades, debería tener lugar este año con cuatro pacientes.
Se trata de trasplantar a cada uno de ellos dos millones de células (iPS) en la espina dorsal. Tras la operación está previsto un programa de reeducación y de supervisión durante un año.
El objetivo principal del ensayo, que el equipo presenta como el primero del mundo en la materia, es verificar si las células trasplantadas son inocuas y validar el método de trasplante.
“Haremos lo máximo posible para proporcionar un tratamiento a los pacientes y garantizarles la seguridad”, dijo Hideyuki Okano, profesor de fisiología, en una rueda de prensa.
El estudio será llevado a cabo en pacientes de 18 años o más que han perdido completamente sus funciones motrices y sensoriales.
En Japón más de 100.000 personas están paralizadas por lesiones de médula espinal.