Un evangelista con seis décadas predicando, resume su visión de lo que falta en las iglesias evangélicas de hoy
“La iglesia tiene que arrepentirse”, así resume Nicky Cruz, un predicador legendario, la coyuntura actual del cristianismo frente a la realidad de sociedad y la juventud. “Tenemos que ser como Cristo nos enseñó; hacer discípulos”, enfatizó Cruz, desde un sillón en el lobby del hotel Riu donde se hospeda en esta capital.
Cómo si hubiese acabado de pasar, Nicky Cruz cuenta aún lleno de emoción las anécdotas alrededor de como cambió su vida el día que decidió dejar de ser parte de una pandilla en Nueva York a finales de la década de los 50.
“Desde ese día no he parado de hablar de Él; sabes cuál es mi secreto: Estoy enamorado de locamente de Jesús, entonces le habló a todo el que pueda”, dice Cruz al explicar que esa función básica se ha diluido en el estilo de vida cristiano de hoy.
“Esto es lo que Dios quiere, haced discípulos y un discípulo se gana a otro, es una cuestión de comunicación”, explica Cruz y al mismo tiempo advierte que las iglesias se ha enfocado en teologías “que ni Dios conoce”. Añade que con el crecimiento el liderazgo pierde el contacto directo con los feligreses: “Ya el pastor no puede hablar con las personas y te manda que te atienda otro, que parece adorar más al pastor que a Dios mismo”.
“Los tiempos están cambiando y la iglesia tiene que despertar”, insiste el predicador nacido en Puerto Rico en 1938 y criado en Nueva York de mediados del Siglo XX. “Es una labor de comunicación uno a uno, formar un ejército”; señala y reitera: “El llamado es a hacer discípulos no a ser apóstoles”.
Nicky Cruz, autor del best seller “Corre Nicky, corre” (1968), vista Panamá esta semana y estará dictando una conferencia en la iglesia Alcance Victoria ubicada en Calle Uruguay, en la capital canalera, este miércoles 27 a las 7 de la noche.
Dios bendiga a su siervo Nicki cruz