El secretario de Estado Mike Pompeo advirtió este jueves que Estados Unidos responderá de una forma “rápida y firme” ante cualquier ataque de Irán, la última amenaza de una serie intercambios entre ambos países.
“El régimen de Teherán debería saber que cualquier ataque hecho por ellos o por sus delegados contra intereses de Estados Unidos o contra sus ciudadanos va a recibir una respuesta rápida y firme”, dijo Pompeo en un comunicado.
En tanto, más temprano el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, reafirmó el jueves estar abierto a conversar con los líderes iraníes, en medio de las crecientes tensiones entre Washington y Teherán.
“Lo que me gustaría ver con Irán es que me llamaran”, dijo Trump a periodistas en la Casa Blanca, destacando que lo que su gobierno no quiere es que la república islámica se dote de armas nucleares.
Las relaciones entre Washington y Teherán se tensaron considerablemente desde hace un año, cuando Estados Unidos decidió retirarse unilateralmente del acuerdo internacional nuclear con Irán por considerar que el pacto, negociado durante el gobierno del presidente demócrata Barack Obama, no frenaba las ambiciones armamentísticas de Teherán.