El púgil sorprendió al mundo del boxeo al superar por nocaut a Joshua y se habla de una revancha en diciembre de este año.
El estadounidense de ascendencia mexicana Andy Ruiz Jr. venció este sábado contra todo pronóstico al hasta entonces campeón invicto de los pesos pesados Anthony Joshua por nocaut técnico en el Madison Square Garden de Nueva York, materializando una de las mayores sorpresas de la historia del boxeo.
Andy Ruiz Jr. derribó en cuatro ocasiones al británico y el juez detuvo la pelea en el séptimo asalto, convirtiendo al norteamericano en el nuevo campeón de los pesados por la Asociación Mundial (AMB), la Federación Internacional (FIB) y la Organización Mundial de Boxeo (OMB).
“Quiero dar las gracias a Dios por darme esta victoria que parecía imposible. Me siento tan bien… Por esto he estado soñando y he trabajado tan duro. No me puedo creer que haya hecho mis sueños realidad. El cielo es el límite”, dijo el vencedor tras la pelea.
“Acabo de hacer historia para México”, gritó el campeón, exultante.
Ruiz Jr., apodado “The Destroyer” (El Destructor), se convirtió en el primer mexicano-estadounidense en ser campeón del mundo de los categoría.
“Quiero felicitar a Ruiz Jr. Mucho, mucho respeto Andy. Gracias América, gracias a todos. Siento haber decepcionado a mis aficionados pero mucho respeto y disfruta este momento”, señaló por su parte Joshua, que perdió la primera pelea de su carrera.
“No es una excusa pero definitivamente sí, lo he infravalorado”, añadió.
El británico, el mejor púgil del mundo hasta este sábado, se quedó con un récord de 22 victorias (21 por KO) y una derrota mientras el norteamericano amplió su balance a 33-1, con 22 nocauts.
Ambos podrían protagonizar ahora una revancha a finales de año en Reino Unido, según señaló el promotor Eddie Hearn al acabar el combate.
– Batacazo histórico –
Nacido en California, Ruiz, de 29 años, deseaba ofrecer la victoria a México, el país de sus padres y que representó en los Juegos Olímpicos de Pekín en 2008.
“He querido demostrar a todos los que dudaban de mí y pensaban que me iban a derribar desde el principio que estaban equivocados. Es increíble”, declaró en conferencia de prensa.
A pesar de que las apuestas daban como gran favorito a su oponente, Ruiz controló la pelea en los dos primeros asaltos, conectando poderosos jabs y contraatacando en cuanto podía.
Pero todo pareció definirse en el tercer round: Joshua dio muestra de su poder derribando a su rival con un potente golpe en la testa y, cuando todo el público esperaba que acabara con él, Ruiz Jr. se rehizo y tumbó a su vez al británico, que no parecía entender lo que estaba pasando.
Tras levantarse, y luego de unos segundos donde el público celebró el momento único que estaba viviendo, el local devolvió a la lona a Joshua para la sorpresa generalizada del mundo entero. Éste nunca pareció recuperarse.
Sin embargo, el nacido en Watford consiguió mantenerse en pie y fue recuperando terreno en el cuarto, el quinto y el sexto asaltos, manteniendo la distancia, conectando buenos golpes y volviendo a ser el favorito tras unos momentos de pánico.
Pero Ruiz Jr. quería entrar en la historia. “Por México”, como había repetido antes del combate. Y, en el séptimo, lo demostró dos veces, obligando al árbitro a detener la pelea.
“Viva Mexicooooo felicidades Andy me da muchísimo gusto ver a alguien con determinación triunfar”, escribió el azteca Saúl “Canelo” Álvarez en su cuenta de Twitter.
“Wow! Andy Ruiz acaba de sorprender al mundo. Esta ha sido una de las mayores sorpresas de la historia del boxeo”, valoró por su parte el filipino Manny Pacquiao.
Este resultado altera el statu quo de los pesados, compartido por Joshua, su compatriota Tyson Fury y el estadounidense Deontay Wilder, campeón por el Consejo Mundial de Boxeo (CMB).
El norteamericano, acusado frecuentemente por el británico de retrasar su pelea, lo criticó abiertamente tras su derrota.
“No era un verdadero campeón. Toda su carrera se ha cimentado sobre mentiras, contradicciones y regalos. Ahora sabemos quién evitaba a quién”, apuntó en redes sociales.