La firma, que prevé su salida del mercado asiático y europeo, es la última víctima de las cadenas con tiendas físicas obligada a reestructurarse ante el auge del comercio en línea.
La cadena de moda Forever 21 introdujo un pedido de protección de quiebra ante una corte en Estados Unidos para facilitar un proceso de reestructuración, que no afectará sus operaciones en América Latina.
La firma, que prevé su salida del mercado asiático y europeo, es la última víctima de las cadenas con tiendas físicas obligada a reestructurarse ante el auge del comercio en línea.
“Es un paso necesario e importante para asegurar el futuro de la compañía, que nos permitirá reorganizar el negocio y reposicionar a Forever 21”, dijo su vicepresidenta Linda Chang en un comunicado.
Forever 21 y sus subsidiarias en Estados Unidos invocaron el domingo de noche ante una corte en Delaware el denominado “Capítulo 11” de la Ley de Quiebras, en el que presentaron una solicitud de protección que le garantiza mantener el control y posesión de sus bienes mientras se lleva adelante la reestructuración.
La empresa inició un proceso similar en Canadá.
Para facilitar su reestructuración, recibió un financiamiento de 275 millones de dólares para mantener sus operaciones normalmente al tiempo que reduce en tamaño algunas de sus tiendas.
“Estamos seguros de que emergeremos como una empresa más fuerte, más competitiva y mejor posicionada para prosperar en los años venideros, y seguimos comprometidos con la entrega de las tendencias de moda rápida que nuestros clientes esperan”, indicó Chang.
– “Maximizar valor” en América Latina –
Fundada en Los Ángeles en 1984 por el matrimonio surcoreano integrado por Do Won y Jin Sook Chang, Forever 21 se convirtió en una de las tiendas favoritas de los adolescentes, ofreciendo imitaciones de grandes marcas de moda a precios muy accesibles.
Compitiendo con firmas como H&M y Zara, la cadena lanzó una agresiva expansión en el sector de la ropa masculina y el calzado tras el crash económico de 2008, e incrementó a 800 su número de tiendas en todo el mundo.
El plan de reestructuración contempla ahora el cierre de 350 de estos puntos de venta en todo el mundo, incluidos 178 en Estados Unidos.
“Esperamos que un número significativo de estas tiendas sigan abiertas y operando normalmente, pues no esperamos salir de ninguno de los mayores mercados en Estados Unidos”, señaló la empresa, que a principios de mes anunció que cerraría sus 14 puntos de venta en Japón a finales de octubre.
“La reestructuración de Forever 21 se centrará en maximizar el valor de nuestra presencia en Estados Unidos, México y América Latina (…). El mercado latinoamericano no se verá afectado por la declaración de hoy en Estados Unidos”, añadió el texto enviado este lunes a la AFP.
Forever tiene operaciones en grandes mercados latinoamericanos como Brasil y México. También tiene tiendas en Colombia, Chile, Ecuador, Perú, Uruguay, Paraguay y Bolivia, así como en Puerto Rico, Costa Rica, Guatemala, República Dominicana, Honduras, Panamá y El Salvador.
– “#Never21” –
Analistas afirman que Forever 21 no reaccionó a tiempo al ascenso de las ventas online, algo que afecta a todos los minoristas.
“Hay que pensarlo dos veces antes de abrir una tienda”, dijo a la AFP Anthony Dukes, profesor de mercadeo en la Universidad del Sur de California (USC). “Si no ofrece nada diferente, nada que no pueda hacer en internet, es un gran riesgo”.
“Vemos como muchos centros comerciales de Los Ángeles buscan ofrecer una experiencia” que va más allá de ser un espacio con tiendas, añadió el experto, que no prevé, “aún por lo menos”, que el mercado minoritario físico sucumba completamente al mercado online.
Forever 21 enfrenta además el cambio de actitud de los consumidores por el impacto medioambiental de la moda rápida y la preocupación por las condiciones de trabajo en las fábricas que elaboran sus muy baratos productos.
El martes pasado, la ONG PETA (Personas por el Trato Ético de los Animales) protestó a las afuera de una de las tiendas de la cadena en Bogotá contra el uso de lana de oveja.
“#Never21” (#Nunca21) se leía en una de las pancartas.
Forever enfrenta también una demanda por 10 millones de dólares de la estrella del pop estadounidense Ariana Grande, que los acusó de usar su estilo-marca para promocionar productos sin su permiso.