Ejecutivos de FCC confesaron corrupción en Panamá, el acuerdo busca minimizar las sanciones. Empresa ofrece pagar 20 millones de multa, Marjorie Wells de Mejía, la abogada
Marjorie Wells de Mejía, una abogada panameña de mediana edad es la mujer que negocia a nombre de FCC con el Ministerio Público de Panamá en la búsqueda de un acuerdo entre la constructora española y las autoridades, tras una investigación que va tras la pista de sobornos y coimas entregados en Panamá entre 2009 y 20014.
La abogada es quien formalmente dirige el bufete Mejía y Asociados desde 2008, cuando su marido, Jerónimo Mejía se convirtió en Magistrado de la Corte Suprema. Según la información del sitio web de la firma Marjorie es hace 11 años la responsable final de todo.
Ahora el paquete que maneja no es poca cosa. FCC intenta aportar información a las autoridades panameñas que le garanticen un acuerdo judicial, que libere a la firma de sanciones severas. Han puesto en el tapete la confesión de dos ex ejecutivos de la constructora que afirman que se pagaron “coimas” por cada proyecto obtenido en Panamá en el periodo de gobierno de Ricardo Martinelli.
Según la confesión de Julio Casla García y Eugenio del Barrio Gómez. la empresa habría pagado “coimas” equivalentes al 10% de los contratos que ganaron en el periodo investigado, de acuerdo a lo publicado por el Diario La Estrella de Panamá, que dio cuenta de las negociaciones.
En total entre el tramo 1 y 2 de la ampliación de la Vía Brasil por 306 millones de dólares, la ciudad hospitalaria por 517 millones dólares, el hospital Luis Chicho Fábrega por 127 millones de dólares, y además se menciona la línea 1 y 2 del Metro de Panamá se calcula que FCC pudo contratar obras por 3 mil millones de dólares en Panamá en ese periodo, lo que implica la distribución de 300 millones de dólares en “coimas” ¿A quién? ¿Cómo? y ¿Cuándo? aun es un secreto y seguramente factores determinantes para lograr el trato.
Las confesiones incluyen la revelación por primera vez de que en la Línea 1 del Metro de Panamá hubo sobreprecios.
Si ella es abogada, puede perfectsmente tener los clientes que quiera, además esa es una actividad que realiza ante el Ministerio Público, no ante la Corte Suprema. Si ese caso llegara a la Corte o a la Sala Penal, donde está su esposo, es él quien debe declararse impedido para siquiera ver el caso, debido a que es su cónyugue una de las abogadas de una de las partes, sólo eso. Elnque ella esté casada con un Magistrado no le coarta su derecho al libre ejercicio de su profesión, es incluso atentatorio contra su derecho como persona y mujer.
Totamente de acuerdo
De los sobreprecios de la línea uno venimos hablando desde 2013-14 y siempre hemos dicho que ese era un negocio conjunto de cachaza con aguia por eso dejaron a Roy en el cargo.
[…] Fuente: En Segundos Panamá […]
No veo la conexión…. las coimas no pasaron por ella. Es una abogada como otra más. Creo que el tema lo están vinculando lara desacreditar al esposo.
Es tipico de los periodicos poner titulares sensacionalistas, que muchas veces hasta se contradicen con la noticia en si. Vivimos en la era de la desinformación