Por segundo día consecutivo, muchos iraníes tomaron este sábado las calles, y las protestas se extendieron a varias ciudades.
Los iraníes volvieron a movilizarse el sábado en varias ciudades del país, un día después del inesperado anuncio por el gobierno del aumento del precio de la gasolina, y de la muerte de un civil durante una manifestación, según los medios locales.
La reforma fue presentada como una medida para recaudar dinero que sería distribuido entre las familias pobres, en un país productor de petróleo cuya economía está asfixiada por las sanciones estadounidenses.
Pero nada más ser anunciado, este aumento suscitó divisiones, sobre todo en las redes sociales y en el seno de la clase política, que critica el momento elegido por el gobierno, a pocos meses de las elecciones legislativas de febrero.
Por segundo día consecutivo, muchos iraníes tomaron este sábado las calles, y las protestas se extendieron a varias ciudades, según la agencia oficial Irna.
En Teherán, varios manifestantes fueron vistos bloqueando una carretera, otros se encontraban cerca de un vehículo en llamas. Se produjeron escenas similares en Shiraz e Ispahan (centro).
En Sirjan (centro), el viernes por la noche las manifestaciones ya fueron “importantes” y la gente “atacó un depósito de gasolina e intentó prenderle fuego”, antes de que la policía interviniera para evitarlo, explicó Irna.
“Desgraciadamente una persona murió”, dijo Mohammad Mahmudabadi, el gobernador interino de Sirjan, citado por Irna.
También indicó que hay civiles heridos e insistió en el hecho de que “las fuerzas de seguridad no recibieron la autorización de disparar [a los manifestantes] y que solo fueron autorizadas a disparar [al aire] como advertencia”.
El viernes también hubo protestas en Machhad (norte), en Ahvaz, Shiraz y Bandar Abbas (sur), en Birjand, en el este, y en Gashsaran, Abadan, Khoramshahr y Mahshahr, en el suroeste.
La televisión estatal acusó a los “medios hostiles” de divulgar “falsas noticias” y videos exagerando la magnitud de las protestas.
l fiscal general, Mohamad Jafar Montazéri, declaró que la población “no se suma a algunos elementos radicales” cuyas acciones muestran que están contra el sistema.
La oenegé especializada en ciberseguridad NetBlocks afirmó el sábado en Twitter que en Irán había un “corte casi total de internet (…) tras 12 horas de desconexión progresiva de la red”.
– Gasolina subvencionada –
El gobierno iraní anunció el viernes un aumento de al menos el 50% del precio de la gasolina, fijado hasta ahora en 10.000 riales, menos de ocho céntimos de euro (0,09 dólares) por litro.
Irán es uno de los países donde la gasolina está más subvencionada. Gracias a los precios bajos, el consumo de carburante es elevado, con 90 millones de litros consumidos al día en un país de 80 millones de habitantes.
El aumento debería generar 300 billones de riales (uno 2.300 millones de euros, 2.542 millones de dólares) adicionales al año, indicó la televisión de Estado y el responsable de planificación del presupuesto, Mohammad Bagher Nobakht.
Según el presidente, Hasán Rohani, los beneficios de esta medida tienen que ser redistribuidos entre los iraníes que se enfrentan a dificultades económicas, es decir un 75% de la población.
Los montos pagados a unos 60 millones de iraníes irán de 550.000 riales (unos 4,2 euros, 4,6 dólares, en el cambio en el mercado libre) para las parejas, hasta los dos millones de riales (15,8 euros, 17,5 dólares) para los hogares de cinco personas y más.
Los primeros pagos se harán dentro de diez días, según Nobakht. “Ni un solo rial irá al Tesoro”, prometió Rohani.
En diciembre de 2018, el mandatario ya intentó aumentar los precios de la gasolina, pero la medida fue bloqueada por el parlamento.
La inflación en Irán es de más del 40% y, según el Fondo Monetario Internacional (FMI), la economía se contraerá este año un 9% y en 2020 tendrá crecimiento cero.
El bajo precio del carburante genera un importante contrabando en el país y uno de sus destinos principales es Pakistán donde los carburantes son más caros.
Rohani indicó el viernes que se había resistido a los llamamientos del gobierno a subir el precio de la gasolina al nivel de otros países de la región para luchar contra el contrabando y afirmó que esto haría aumentar la inflación.