Con un presupuesto de $315 millones y donde $267 millones serán destinados para inversión, el Mides tendrá la labor de generar un desarrollo social que impacte a todos los sectores.
La primera infancia, los adultos mayores, las personas con discapacidad y aquellos que viven en pobreza extrema o pobreza multidimensional serán las poblaciones que tendrán prioridad para el Ministerio de Desarrollo Social (Mides) en este 2020. La ministra Markova Concepción hizo un repaso del plan de trabajo que se aplicará para este año, donde las poblaciones más vulnerables serán beneficiadas con toda la oferta social que genere el Mides, informó la institución.
Con un presupuesto de $315 millones y donde $267 millones serán destinados para inversión, el Mides tendrá la labor de generar un desarrollo social que impacte a todos los sectores, primordialmente a los más desprotegidos. En ese sentido Markova Concepción recordó que en Panamá aún viven 453,837 niños, niñas y adolescentes pobres de acuerdo al último Índice de Pobreza Multidimensional de Niños, Niñas y Adolescentes (IPM-NNA) 2018, elaborado por el MIDES, Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) y el Instituto Nacional de Estadística y Censo (INEC). La mayor cantidad de ellos se concentra en la comarca Ngäbe Buglé con 112,857, mientras que la mayor incidencia de pobreza en niñez está en las edades de 0 a 9 años.
Frente a este panorama la ministra destacó que para combatir estas desigualdades se desplegarán programas que fortalecerán el desarrollo de la primera infancia. Indicó que a finales del mes de enero se inaugurarán cinco nuevos Centros de Atención Integral a la Primera Infancia (CAIPI) que sumado a los 97 que existen, brindarán estimulación temprana y una buena nutrición a más de 2 mil niños y niñas de 0-4 años.
La ministra expresó que el MIDES ya presentó ante la Asamblea de Diputados el proyecto de ley de la protección a la Primera Infancia y promoción del desarrollo infantil temprano que permitirá promover e impulsar los derechos fundamentales relacionados a esta población vulnerable, garantizando de esta manera los cuatro derechos fundamentales que rigen la Ruta de Atención Integral a la Primera Infancia (RAIPI), entre los que se destacan: Crianza con Pautas Adecuadas, Aprendizaje Temprano, Identidad y Salud y Nutrición.
En relación a los adultos mayores indicó que seguirán trabajando para que se le respete los derechos que tiene esta población. En ese sentido adelantó que seguirán inspeccionando las casas hogares cada tres meses a fin de establecer normas que garanticen el buen funcionamiento y atención de calidad de estos centros. En la actualidad la coordinación de Adulto Mayor del MIDES ha inspeccionado 71 casas donde viven más de 2 mil adultos.
Al referirse a las personas con discapacidades Markova Concepción recalcó la importancia que tiene la reciente firma de la reglamentación de la Ley No.15 del 31 de mayo del 2016, que reforma la Ley 42 de 1999, que establece la equiparación de oportunidades para las personas con discapacidad y sus familiares. Esta reglamentación, a juicio de la funcionaria permitirá definir programas con objetivos claros y específicos para una población que asciende a 370 mil personas en Panamá, de acuerdo a la Primera Encuesta Nacional de Discapacidad realizada en el 2006 por la Secretaría Nacional de Discapacidad (Senadis).
En lo que respecta a la población en pobreza y pobreza extrema la titular de la cartera social reafirmó su compromiso de seguir generando bienestar a los más de 195 mil beneficiarios de los Programas de Transferencia Monetaria Condicionada (PTMC) que reciben al año $224.6 millones, ingresos que le ayudan a cubrir gastos básicos como: alimentación, educación, servicios de salud y otros de primera importancia. También destacó que seguirán modernizando los programas: 120 a los 65; Ángel Guardián, Red de Oportunidades y SENAPAN, para que estos servicios beneficien a los más necesitados.
Para que esto se logre el MIDES ha retomado y acelerado el proceso de creación del Registro Nacional de Beneficiarios (RENAB), haciendo uso de la tecnología lo cual permitirá cruzar información entre la base de datos de los beneficiarios de los PTMC con más de 15 instituciones públicas y privadas para garantizar que los recursos lleguen a las personas con pobreza y pobreza extrema de nuestro país, evitando que quienes no lo necesitan sigan haciendo uso irresponsable de este beneficio.
Otro punto que recalcó fueron las alianzas público-privada que permitieron en el 2019 gestionar más de 700 becas de emprendimientos en áreas apartadas como la Comarca Ngäbe-Buglé y la provincia de Bocas del Toro a un costo de 147 mil 920 balboas.
También destacó todo el trabajo que está realizando la Red Nacional de Juventud por los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) que ha logrado capacitar a más de 900 jóvenes sobre la importancia desarrollar proyectos sociales, dirigidos a resolver los principales problemas de las comunidades.
La ministra Markova Concepción concluyó su lista de prioridades con el proyecto Colmena, “Panamá libre de pobreza y hambre, la Sexta Frontera” que impactará a los 300 corregimientos más pobres del país, mejorando la calidad de vida de 777 mil panameños y panameñas que viven pobreza multidimensional y se han quedado atrás. En esa línea de ideas destacó que Colmena ya está generando respuestas concretas. Como ejemplo señaló que Capira se convirtió en el primer espacio de intervención piloto en culminar de forma exitosa los diagnósticos comunitarios, lo que permitirá que el Estado oferte los servicios que la comunidad necesita impulsando de esta forma un desarrollo equitativo.
Para la ministra Markova Concepción, este 2020 será un año de oportunidades que le permitirá al Estado, a través de sus diferentes ministerios, gestionar proyectos y programas focalizados a combatir a la pobreza y reducir las brechas de las desigualdades, una meta que está inmersa en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) que buscan asegurar la prosperidad para todos los ciudadanos del planeta.