Para limitar el riesgo de propagación de la COVID-19, no se invitó a sus familiares ni a los periodistas.
Sin familias ni periodistas, los tres tripulantes que se preparan para ir la Estación Espacial Internacional (ISS) tuvieron el miércoles una conferencia de prensa final poco habitual debido a la epidemia de coronavirus.
El estadounidense Chris Cassidy y los rusos Anatoli Ivanichin e Ivan Vagner despegarán el jueves a las 08H05 GMT del cosmódromo ruso de Baikonur, en Kazajstán, para realizar una misión de seis meses a bordo de la ISS.
Sin embargo, para limitar el riesgo de propagación de la COVID-19, no se invitó a sus familiares ni a los periodistas a Baikonur para que asistieran a su última rueda de prensa, que se hizo por videoconferencia.
“En lugar de hablar con las cámaras, estaríamos hablando con la gente en este momento”, comentó Cassidy
El astronauta de 50 años, que viaja por tercera vez al espacio, reconoció que la tripulación está “afectada” por la ausencia de sus familias. “Pero entendemos que el mundo entero también está afectado por la misma crisis”, añadió.
Sin embargo, las medidas de cuarentena no son una novedad para las tripulaciones espaciales, que se someten a ellas antes de cada despegue hacia la Estación Espacial Internacional.
En sus últimas conferencias de prensa, también se les separa del público por una ventana para evitar contraer enfermedades. Esta vez, su aislamiento de personas ajenas a la misión fue “aún mayor”, dijo el cosmonauta Anatoli Ivanichin.
El lanzamiento del jueves será el primero a bordo de un cohete Soyuz-2.1a, puesto que la agencia rusa Roskosmos dejó de utilizar el año pasado los Soyuz-FG, más antiguos.
Este nuevo modelo, utilizado para lanzamientos sin tripulación desde 2004, dispone de sistemas de comando digitales en lugar de los analógicos del modelo previo.
Según Ivanichin, el nuevo sistema requerirá menos intervención manual en caso de emergencia. “El sistema ha mejorado, pero es demasiado pronto para saber si será más fácil de controlar”.