El presidente Donald Trump, que considera la reapertura de la economía una prioridad, dijo el jueves.
El número de desempleados continúa subiendo en Estados Unidos, con millones de nuevos pedidos de prestaciones cada semana, y la posibilidad de que la tasa de desempleo para abril se acerque al 20%, el doble de lo registrado en la Gran Recesión de 2009.
Estados Unidos, el país del mundo con más casos y muertos por la pandemia del nuevo coronavirus, registró 3,2 millones de nuevas solicitudes de beneficios por desempleo durante la semana del 26 de abril al 2 de mayo, informó el jueves el Departamento de Trabajo.
Esas cifras elevan a 33,5 millones el número de solicitudes por desempleo presentadas desde mediados de marzo, cuando la crisis sanitaria obligó a las empresas a cerrar sus puertas y más de 94% de la población fue llamada a confinarse para detener la propagación del virus.
El pico de pedidos de beneficio por desempleo en Estados Unidos se alcanzó a fines de marzo, con 6,8 millones de nuevos desempleados en una semana. Desde entonces, la baja en las solicitudes ha sido muy lenta, pero el tiempo en que Estados Unidos registraba 200.000 o 250.000 nuevos demandantes cada semana parece estar muy lejos.
El presidente Donald Trump, que considera la reapertura de la economía una prioridad, dijo el jueves: “Este país no puede permanecer cerrado y bloqueado durante años”.
Algunos estados ya anunciaron planes para levantar las restricciones.
“Esperamos el inicio de un repunte (económico) en junio a medida que los estados comiencen a reanudar la actividad”, pero el ritmo al cual las empresas volverán a contratar no está claro, dijo Ian Shepherdson, de Pantheon Macroeconomics.
Los derechos de beneficios por desempleo se han extendido temporalmente a personas que anteriormente no podían reclamarlos, como los trabajadores independientes.
– Comparable a la Gran Depresión –
Las cifras semanales de solicitudes de desempleo dan una estimación del daño causado por el nuevo coronavirus a la economía de Estados Unidos, que según muchos analistas ya está en una profunda recesión.
El país está compensando a más desempleados que nunca: 22,6 millones de personas en la última semana de abril, frente al 1,7 millones antes de la pandemia. Esto representa una tasa de desempleo del 15,5%, según las cifras publicadas el jueves.
El viernes se revelarán más detalles cuando el Departamento de Trabajo publique los datos del desempleo de abril, la primera encuesta que cubre las semanas en que las medidas de confinamiento de la población estaban en plena vigencia.
Se espera que el informe mensual muestre que la tasa de desempleo se disparó a alrededor de 20%, un marcado cambio frente al 3,5% en febrero, el nivel más bajo en 50 años. En marzo sólo aumentó ligeramente, a 4,4%.
Algunos economistas esperan 28 millones de empleos perdidos en abril. En comparación, se perdieron 8,6 millones de empleos durante los dos años de la crisis financiera mundial que comenó en 2008. Por lo tanto, la Gran Recesión de 2009 ya no es el punto de referencia, sino la Gran Depresión de la década de 1930.
“Estamos viendo lo que parece ser la peor crisis económica desde la Gran Depresión”, dijo el líder de la minoría demócrata en el Senado, Chuck Schumer, mientras en el Congreso se debate un nuevo plan de estímulo económico luego del megapaquete de 2,2 billones de dólares aprobado en marzo.
Otras encuestas publicadas el jueves mostraron señales preocupantes de la crisis económica, alimentando la especulación de que Estados Unidos enfrenta una recuperación larga y dolorosa.
La productividad en el primer trimestre de 2020, solo unas pocas semanas en las cuales varias regiones del país estaban bajo orden de cierre, cayó un 2,5% en comparación con el cuarto trimestre de 2019, resultado de una caída de la producción del 6,2% y un 3,8% de reducción en el número de horas trabajadas.
“Las esperanzas de una recuperación sostenida de la productividad se están desvaneciendo”, señaló la consultora Oxford Economics en un análisis.
La firma global de servicios de recolocación Challenger, Gray & Christmas dijo que los recortes de puestos de los empleadores con sede en Estados Unidos aumentaron en abril a 671.129, el número más alto desde que comenzaron a registrarse en enero de 1993.
“La naturaleza indefinida de esta pandemia, junto con el hecho de que estamos viendo datos económicos a nivel de recesión o incluso depresión, significa que la gran mayoría de estos trabajos no volverán pronto”, dijo el vicepresidente senior de la firma, Andrew Challenger.