A partir de 2017, el instituto de investigación criminal de la gendarmería francesa detectó en sus operaciones el uso de teléfonos cifrados por criminales.
Las autoridades judiciales y policiales de Francia y Países Bajos anunciaron este jueves el desmantelamiento de una red mundial de comunicaciones encriptadas, llamada EncroChat, utilizada casi exclusivamente por organizaciones criminales.
La red se usaba para actividades de narcotráfico, asesinatos, blanqueo de dinero, extorsión o secuestros.
La operación propició “múltiples detenciones” en varios países europeos y ha impedido que se cometan muchos delitos, indicaron en una rueda de prensa en La Haya (Países Bajos).
La investigación conjunta, bajo la égida del organismo de cooperación judicial europea Eurojust, permitió en los últimos meses interceptar y descifrar en tiempo real “más de cien millones de mensajes” entre criminales, sin su conocimiento.
La interceptación de estos mensajes terminó el 13 de junio cuando la red EncroChat se dio cuenta, según un mensaje de “alerta” a sus clientes, de que “entidades gubernamentales” se infiltraron “ilegalmente” y les urgió a deshacerse “inmediatamente” de sus celulares.
Según las autoridades, la práctica totalidad de los clientes de EncroChat (“entre el 90% y el 100%”) están vinculados al crimen organizado. Unos 50.000 de estos teléfonos estaban en circulación en 2020.
A partir de 2017, el instituto de investigación criminal de la gendarmería francesa detectó en sus operaciones el uso de teléfonos cifrados por criminales y, desde entonces, trabajaba sobre el funcionamiento de estas comunicaciones.
Una fiscalía especializada de Lille (norte de Francia) dirigió la investigación desde 2018 por la localización de los servidores, garantizando el funcionamiento de EncroCaht en su jurisdicción.
Aunque Francia no desea dar detalles de las operaciones en curso, las autoridades neerlandeses aseguran que la investigación permitió impedir la comisión “de decenas de actos criminales violentos”, entre ellos secuestros, asesinatos y tiroteos.
“Es sorprendente la facilidad y la falta de escrúpulos con que se discute y se planifican estos graves actos criminales” en EncroChat, aseguran.
En Países Bajos, la investigación permitió la detención de “más de 100 sospechosos”, la incautación de “más de 8.000 kilos de cocaína y 1,2 toneladas de metanfetamina”, y el desmantelamiento de “19 laboratorios de drogas sintéticas”.
Asimismo, las autoridades neerlandesas se incautaron de “decenas de armas de fuego automáticas”, de “relojes de lujo”, de “25 vehículos”, así como “casi 25 millones de euros [28 millones de dólares] en metálico”.