Panamá esta viviendo una cuarentena sangrienta. Homicidios y balaceras constantes mantienen a la población intranquila.
La escalada de violencia que Panamá ha vivido en las últimas 48 horas es de terror. Un total de 14 personas han sido asesinadas y se han registrado al menos tres balaceras, todas en sectores aledaños a la capital panameña.
Los homicidios más escalofriantes se han registrado en la costa atlántica. En un lugar apartado y selvático del sector de Espinar siete jóvenes fueron brutalmente asesinados.
Esta mañana, la Policía Nacional ha informado sobre la captura de uno de los presuntos implicados en estos homicidios. El presunto vinculado enfrentará en las próximas horas una audiencia de control de garantías y legalización de la aprehensión.
Hasta el momento, se desconoce cual fue el móvil de estos crímenes que han sacudido la poca tranquilidad de la población panameña con la difícil situación sanitaria provocada por el Covid-19 y que ha cobrado la vida de más de mil personas.
En Colón hay consternación, incertidumbre y un gran clamor de justicia por un hecho sangriento que no tiene precedentes en esta provincia. Más cuando los fallecidos tenían toda una vida por delante.
Esta mañana también ha circulado información sobre la existencia de un octavo cadáver en los predios donde ocurrió la masacre de los siete jóvenes (cuatro mujeres y tres hombres). Sin embargo, hasta el momento ninguna autoridad ha confirmado esta información.
Suenan las balas, sicarios andan sueltos
En barrios populares de la capital panameña también ha corrido la sangre. Hoy varias familias lloran a uno de los suyos caídos a mano de la violencia registrada en las últimas horas.
Esta mañana se confirmó que una joven herida en medio de una balacera protagonizada por bandas rivales en El Chorrillo perdió la vida. La joven quedó en medio de las ráfagas de fuego.
En estas últimas 48 horas, un hombre también fue asesinado a punta de tiros en el sector de Santa Isabel, en Brisas del Mirador.
En Juan Díaz, específicamente en Calle 45, sector de Las Acacias, un sujeto identificado como Rodrigo Rebobello, fue ajusticiado a punta de tiros. Mientras que el sector conocido como la Unión de Agua Buena, en Chilibre fue ultimado un hombre a quién le apodaban “Coco Trastorno”.
En Santa Marta, una adolescente de 16 años fue asesinada con arma de fuego. La Policía Nacional esta tras la pista de su pareja sentimental, quién es señalado como el presunto responsable.
Ayer, en la noche también fueron ejecutados a tiros dos jóvenes, una mujer de apenas 18 años y un ciudadano de 23 años recibieron múltiples impactos de bala en su residencia ubicada en Paso Canoas, en la frontera tico-panameña.
Se conoció que también se habrían registrado balaceras en Pacora y Patio Pinel.
El hambre hace estragos.