La operación es delicada, aun si el año pasado la cápsula Dragon cumplió esta misión sin problemas.
Los primeros astronautas de Estados Unidos que viajaron a la Estación Espacial Internacional (ISS) en una nave estadounidense en una década se encuentran este sábado en la cápsula SpaceX, listos para regresar a la Tierra a pesar del riesgo de huracán en Florida.
“La escotilla de Crew Dragon ya ha sido sellada con vistas a su partida”, tuiteó la NASA. Una vez que la cápsula sea despresurizada, Bob Behnken y Doug Hurley se desacoplarán automáticamente de la ISS.
La partida está prevista “hacia las 19H34 (23h34 GMT), dos meses después de la llegada de los dos hombres a bordo de la cápsula creada por la compañía del excéntrico empresario Elon Musk, precisó la agencia espacial estadounidense.
Unas horas antes, ambos astronautas se habían despedido de los tres colegas que dejaron en la ISS aunque había aún cierta incertidumbre respecto a su viaje teniendo en cuenta las condiciones meteorológicas en Florida.
Tras haber golpeado las Bahamas, el huracán Isaías, retrogradado a tormenta tropical, se dirige hacia el sur de Estados Unidos y podría recobrar fuerza en las próximas horas. Ello podría complicar el amerizaje de SpaceX, previsto para el domingo a las 14H41 (18H41 GMT) en el golfo de México.
Un sitio en las costas de la ciudad de Pensacola (norte de Florida) fue escogido como “prioritario” para el amerizaje, con una alternativa en las cercanías de Panama City, también en el golfo de México, si el mar está muy agitado o los vientos son muy fuertes.
“Lo más difícil fue ponernos en órbita, pero lo más importante es regresar a casa”, dijo Behnken unas horas antes de la partida.
La operación es delicada, aun si el año pasado la cápsula Dragon cumplió esta misión sin problemas. El regreso atmosférico probará la resistencia del escudo térmico. Luego, grandes paracaídas ralentizarán el descenso hacia el océano.
– Un dinosaurio ingrávido –
Dirigiéndose a su hijo y al hijo de su colega, Behnken exhibió un pequeño dinosaurio de colores, que los niños les habían dado para que los acompañara en esta “misión histórica”, y lo hizo volar durante unos instantes.
“Tremor el apatosaurio vuelve a casa con sus papás”, dijo Behnken a los niños, rodeado de sus dos colegas rusos, Anatoly Ivanishin e Ivan Vagner, y del jefe de la misión, el capitán Chris Cassidy.
“Les decimos adiós a nuestros dos amigos y colegas”, dijo Cassidy, declarándose “triste” y “emocionado” al ver a Hurley y Behnken partir de la ISS, destacando la importancia de tener nuevos medios para transportar astronautas.
Behnken y Hurley se han convertido en los primeros astronautas en ser llevados a la ISS, ubicada a 400 km de la Tierra, por una empresa privada contratada por la NASA.
La misión, cuya partida había sido postergada en razón por razones meteorológicas, fue la primera de una nave tripulada lanzada desde suelo estadounidense. La última había sido en 2011 cuando terminó el programa de los transbordadores espaciales.
Por los últimos nueve años, astronautas estadounidenses habían viajado exclusivamente en los cohetes Soyuz rusos, por un precio de cerca de 80 millones de dólares por asiento.
Si la misión actual es certificada segura, Estados Unidos ya no dependerá de Rusia para acceder al espacio.
Por 3.000 millones de dólares, acordados desde 2011 en el marco de un contrato a precio fijo, SpaceX prometió a la NASA seis viajes de ida y vuelta a la ISS con cuatro astronautas a bordo.
El astronauta francés Thomas Pesquet comunicó esta semana que viajará a bordo del Crew Dragon de SpaceX en su segunda misión a la ISS en la primavera boreal de 2021.