Brasil, primera economía de América Latina, registró una contracción récord de 9,7% en el segundo trimestre del año respecto al primeromía
Luego de India el lunes, Brasil dio a conocer este martes una caída histórica de su PIB en el segundo trimestre, siguiendo así la estela de recesiones provocadas por la pandemia de covid-19 en la economía mundial, con la única excepción de China.
El nuevo coronavirus y las medidas de confinamiento abocaron las potencias a una fuerte disminución del Producto Interior Bruto, en muchos casos inéditas desde que se establecieron los métodos de cálculo actuales.
En este recuadro se repasan estas caídas históricas según los datos de los institutos de estadísticas nacionales.
Brasil, primera economía de América Latina, registró una contracción récord de 9,7% en el segundo trimestre del año respecto al primero. Segundo país del mundo con más muertos por la pandemia de coronavirus, con más de 121.000 decesos, entró oficialmente en recesión al sumarse la caída de 2,5% durante el primer trimestre.
India, otro gigante emergente que paga un duro costo por el covid-19 con más de 65.000 muertos, informó 24 horas antes un retroceso histórico interanual de 23,9% de su PIB entre abril y junio.
India evitó por ahora la recesión ya que entre enero y marzo había crecido 3,1%.
– Luz en China –
Estados Unidos, la primera economía mundial, sufrió una caída del 9,5% en el segundo trimestre, tras un retroceso del 1,3% en el primero, según la OCDE, mientras que las estadísticas gubernamentales estadounidenses informaron de una variación del ritmo anual del -32,9% entre abril y junio, aunque estas cifras no resultan comparables con las de otros países.
Tras haber entrado en recesión en el primer trimestre, el PIB de Japón cayó un 7,8% en el segundo trimestre, en lo que representa el tercer trimestre consecutivo en que la economía nipona registra números rojos.
La caída de la economía japonesa representa la más importante desde que en el país del sol naciente se empezaron a recopilar datos comparables en 1980.
En cambio, China, la segunda economía mundial y el país donde surgió el covid-19, evitó entrar en recesión, después de que su PIB creciera un 11,5% en el segundo trimestre tras una caída del 10% en el primero.
Sin embargo, el crecimiento del PIB chino, que en términos interanuales fue del -6,8% para el primer trimestre y del 3,2% para el segundo, resulta uno de los más bajos en el gigante asiático en las últimas décadas.
– Europa atrapada en la recesión –
En Europa, el conjunto de la zona euro registró un crecimiento negativo del 12,1% en la primavera, tras haber bajado un 3,6% en los tres primeros meses del año, lo que representa “de lejos” la caída más importante “desde el inicio de las series temporales en 1995” de la Oficina Europea de Estadística (Eurostat).
Alemania, principal motor económico del Viejo Continente, experimentó una disminución del PIB del 10,1% en el segundo trimestre, tras haber cerrado también en negativo el primero, con un -2%.
Menos afectada por la pandemia que los otros países del continente, dio una pequeña luz de esperanza este martes al afirmar que su estimación de caída para 2020 será menor de lo previsto (-5,8%, contra -6,3% anteriormente).
Sin embargo, la bajada más importante en la zona euro se produjo en España, con un retroceso del 18,5% en el segundo trimestre, tras haber caído un 5,2% en el primero. Una fuerte recesión incentivada por una bajada del 60% de los ingresos procedentes del turismo y de más del 33% de las exportaciones.
La economía francesa también sufrió un fuerte impacto por el covid-19 y el confinamiento, disminuyendo un 13,8% entre abril y junio y un 5,9% en los tres primeros meses del año, mientras que los datos del PIB en rojo en Italia fueron del 12,4% y el 5,4% en el segundo y el primer trimestre respectivamente.
Fue el Reino Unido, sin embargo, el país europeo donde el PIB experimentó una disminución más importante tras bajar hasta el 20,4% entre abril y junio, después de haberlo hecho un 2,2% entre enero y marzo.
En Rusia, según datos de la agencia de estadística Rosstat, la economía decreció un 8,5%, un retroceso propiciado por el coronavirus, pero también por la crisis petrolera.