Con unos 117.000 fallecidos, el Reino Unido es el país europeo más golpeado por la pandemia.
Ante la persistencia de la pandemia de covid-19, el mundo seguía apostando por la vacunación: el Reino Unido superó este domingo el umbral de los 15 millones de vacunados, en tanto que la Unión Europea anunció que adoptará medidas para acelerar la aprobación de nuevos inmunizantes.
El Reino Unido “ha logrado una hazaña extraordinaria”, dijo el primer ministro, Boris Johnson, en un mensaje de vídeo publicado en Twitter, al anunciar que este domingo se cumplió la meta que se había propuesto alcanzar este fin de semana.
En esta primera fase de la campaña, fueron vacunadas las cuatro categorías prioritarias de la población designadas por el gobierno: los mayores de 70 años, el personal sanitario de primera línea, los empleados y residentes de residencias de ancianos y los pacientes más vulnerables.
“La vacuna es nuestra ruta hacia la libertad, venceremos a este virus (…) inyección por inyección”, declaró el ministro británico de Salud, Matt Hancock.
– La UE pisa el acelerador –
Y mientras la preocupación por las nuevas variantes del virus aumentan, la Unión Europea decidió acelerar el proceso de aprobación de vacunas para hacer frente a esas cepas, anunció la comisaria de Salud, Stella Kyriakides, este domingo.
“Hemos analizado con la Agencia Europea de Medicamentos el procedimiento”, declaró Stella Kyriakides al periódico alemán Augsburger Allgemeine.
“Y hemos decidido que a partir de ahora una vacuna mejorada por un fabricante para combatir las nuevas variantes sobre la base de una vacuna ya existente” y certificada “no necesitará pasar todas las etapas de autorización”, afirmó.
La Comisión Europea ha sido muy criticada por su lentitud en el inicio de las campañas de vacunación en los países de la UE, a raíz de los procesos de certificación y de los pedidos de las dosis.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, admitió la semana pasada que se habían cometido errores a la hora de suministrar vacunas a los 27 Estados miembros de la UE.
Ante la propagación de las nuevas cepas, varios países decidieron adoptar medidas unilaterales, sobre todo para restringir la movilidad.
Así, Alemania movilizó a un millar de policías para efectuar controles en sus fronteras con la República Checa y la región austriaca del Tirol, donde se identificó un repunte de los casos de las variantes detectadas en el Reino Unido y Sudáfrica, más contagiosas.
En medio de temperaturas glaciales, en el puesto fronterizo de Kiefersfelden, al límite de Austria, la policía filtraba escrupulosamente la circulación.
Kyriakides criticó la decisión de Alemania, afirmando que las vacunas y las medidas preventivas son “lo único que ayuda” a frenar el avance del virus.
– “El principio del fin” –
Desde que fuera detectado por primera vez en China en diciembre de 2019, el coronavirus ha matado a 2,4 millones de personas. Más de 108 millones contrajeron la enfermedad.
Con más de 639.000 fallecidos (20 millones de contagiados), la región de América Latina y el Caribe es la segunda más castigada del mundo, por detrás de Europa 802.019 fallecidos) y por delante de Estados Unidos y Canadá (505.459).
Estados Unidos continúa siendo el país del mundo más golpeado por la pandemia, con más de 484.000 fallecidos, seguido de Brasil (238.532 muertos) y México (173.771 muertos).
A escala mundial, se han administrado al menos 172,1 millones de dosis de la vacuna en al menos 95 países o territorios, según un recuento realizado por la AFP a partir de fuentes oficiales el domingo a las 17H30 GMT.
Sin embargo, la mayoría de esas dosis fueron inyectadas en los países más ricos.
Líbano empezó este domingo su campaña de vacunación, cuya primera fase implicará a los trabajadores sanitarios y a los mayores de 75 años.
“Esperamos que sea el principio del fin de esta epidemia en el país”, declaró Mahmoud Hassoun, jefe de la unidad de cuidados intensivos del hospital Rafic Hariri en Beirut, y quien fue el primero en recibir la vacuna.
Y Japón, a cinco meses de la inauguración de los Juegos Olímpicos, aprobó este domingo el uso de la primera vacuna contra el covid-19, la de Pfizer/BioNTech, que se empezará a administrar el miércoles a entre 10.000 y 20.000 trabajadores sanitarios.
Entretanto, en Nueva Zelanda, el gobierno ordenó confinar Auckland, la ciudad más grande del país (1,7 millones de habitantes) durante tres días, por primera vez en casi seis meses, después de que tres miembros de una familia dieran positivos al covid-19.
La medida se tomó por “precaución en caso de que la cepa del virus detectada sea una de las más transmisibles”, explicó la primera ministra, Jacinda Ardern.
Nueva Zelanda, con cinco millones de habitantes, ha registrado menos de 2.000 casos y 25 25 muertes atribuidas al covid-19.