El consumo de tabaco en las áreas indígenas, rurales y urbanas de Panamá representa una situación que va en aumento y preocupa a las autoridades sanitarias por las consecuencias negativas a la salud.
Las advertencias realizadas a la población para alejarla del consumo del tabaco en el mundo, al parecer han calado muy poco, cuando se aprecia en números que esta pandemia continúa siendo un problema de salud pública. Una de estas, es la Organización Mundial de la Salud (OMS), que ha pedido a los jóvenes a unirse a la lucha para convertirse en una generación libre de tabaco.
La Encuesta Nacional de Salud de Panamá (ENSPA) del 2019, realizada por el Ministerio de Salud, el Instituto Conmemorativo Gorgas para Estudios de la Salud (ICGES) y el Instituto Nacional de Estadísticas y Censo (INEC) de la Contraloría General de la República, reveló que en las áreas urbanas y rurales el producto de tabaco de mayor consumo es el cigarrillo, mientras que en las áreas indígenas se sitúa el narguile.
El estudio, aplicado a una muestra de un millón 144 mil 608 de personas residentes en áreas urbanas, rurales e indígenas del territorio nacional, determinó que el cigarrillo es el producto de tabaco preferido por los fumadores de 15 años y más, con cifras cercanas al 40%, seguido del narguile y pipa rellena, con 5.8 y 5.6%, respectivamente.
Un detalle del estudio fue que los hombres fuman 1.6 veces más cigarrillos que las mujeres y también usan dos veces más las pipas rellenas.
De igual forma, se desveló que solo los hombres reportaron utilizar el bidis (cigarrillo pequeño, fino y marrón, a menudo aromatizado), mientras que las mujeres fuman más kretek (preparados con una combinación de tabaco, clavos de olor y otros ingredientes que contienen nicotina y muchas sustancias químicas) y narguile que los hombres.
ENSPA es un estudio, de carácter voluntario, con el objetivo de conocer la condición de salud y enfermedad, así como los factores protectores y de riesgos que impactan a la población residente de la república de Panamá.
De acuerdo al neumólogo e internista, Reynaldo Chandler, todos los grupos etarios, o de edad, son susceptibles a padecer cáncer, pero por arriba de los 40 años es cuando se empiezan a hacer más frecuentes. Y, que, entre los 50 y 79 años está el grueso de la población afectada por los principales tipos de cánceres que son causa de muerte.
Citó, por ejemplo, que el cáncer de próstata se convierte en el principal a nivel mundial en hombres y el de mama en las mujeres. Pero, subrayó, que cuando se habla de letalidad, el cáncer que más afecta en cuanto a mortalidad, es el cáncer de pulmón.
Es uno de los más letales y la mayor parte de los pacientes, a los que se le hace el diagnóstico tiene una expectativa bastante corta. Una vez se diagnostica, la mayoría de los pacientes, al cabo de 12 meses, tienen un desenlace de muerte, explicó el especialista.
La relación de muerte por cáncer estaba a favor del varón, pero se ha estado equilibrando por el número de casos nuevos en mujeres también, acotó el doctor Chandler.
Cifras de la OPS/OMS precisan que los fabricantes de tabaco y productos relacionados ,gastan alrededor 9.000 millones de dólares al año en mercadotecnia, para reclutar a nuevos usuarios y así reemplazar a los perdidos por muertes relacionadas con el tabaco.
En el 2020, en el Día Mundial Sin Tabaco, 31 de mayo, la OPS solicitó a los jóvenes de las Américas “para que reconozcan, denuncien y resistan las tácticas engañosas utilizadas por la industria del tabaco y sus aliados para reclutar nuevos y más jóvenes usuarios, a costa de millones de vidas perdidas”.
De acuerdo al organismo, los estudios demuestran que nueve de cada 10 fumadores, empiezan a fumar antes de alcanzar los 18 años. Y que, a nivel global, más de 40 millones de jóvenes, entre 13 y 15 años, ya han comenzado a consumir tabaco.