Esta es la primera vez que estos artesanos que se dedican a elaborar artículos en madera de cocobolo, cestas, accesorios para atuendos típicos, entre otros, son atendidos en su propia región y reconocidos por el gobierno nacional como emprendedores.
El Ministerio de Cultura (MiCultura) a través de sus direcciones de artesanía y derechos culturales y ciudadanía iniciaron una gira como parte del Plan Colmena donde se beneficiaron cerca de 400 artesanos de las regiones de Veraguas, Chepo, Chimán, Chepigana (en su mayoría de la etnia Emberá Wounan), también del distrito de Ocú y áreas cercanas y del corregimiento de Tulú en Penonomé.
Autoridades locales se sumaron a esta jornada de acreditación junto a la Dirección de Población del MEDUCA, quienes les ofrecieron a los artesanos impactados charlas relacionados a temas sobre violencia familiar, ciberbullyng, equidad de género, educación sexual y prevención del abuso sexual infantil, emprendimiento, entre otros.
Esta es la primera vez que estos artesanos que se dedican a elaborar artículos en madera de cocobolo, cestas, accesorios para atuendos típicos, entre otros, son atendidos en su propia región y reconocidos por el gobierno nacional como emprendedores que gracias a su trabajo contribuyen a enriquecer el turismo, la economía local y brindan su talento a través de su arte.
Esta actividad forma parte del programa del Plan Colmena, ideado con la finalidad de la erradicación de la pobreza y la desigualdad en los 300 corregimientos que son impactados.
MiCultura a través de sus direcciones regionales y en conjunto con entidades y autoridades locales ejecutan diversos programas culturales y de emprendimiento con miras a apoyar a los residentes de estas comunidades y provocar una huella positiva en su calidad de vida.
De acuerdo a Jaime Luna, director nacional de artesanías este programa de acreditación es muy significativo porque no solo estamos impactando a las comunidades que son parte del Plan Colmena, sino que al mismo tiempo reconocemos la labor que ellos realizan. Cito como ejemplo a los artesanos del corregimiento de Tulú en Penonomé que después del distrito de La Pintada son los mayores productores del sombrero pintado, reconocido por la UNESCO como patrimonio inmaterial cultural de la humanidad.