El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció este lunes que va a subir a 62.500 la cuota anual de refugiados que admitirá el país, después de que su decisión de mantener el mínimo de 15.000 marcado por el gobierno anterior generara una ola de críticas.
“Esto borra una cifra históricamente baja establecida por el anterior gobierno de 15.000, que no refleja los valores de Estados Unidos como nación que acoge y apoya a los refugiados”, indicó la Casa Blanca en un comunicado.