El flujo de migrantes que llegan a la frontera sur de Estados Unidos sigue siendo alto, dijo este jueves un alto funcionario estadounidense, en vísperas de la publicación de las cifras de abril, después de que en marzo el número de detenciones alcanzara un máximo en 15 años.
“Seguimos viendo grandes flujos de migrantes en nuestra frontera sur”, indicó un alto funcionario que habló a condición de anonimato.
En marzo, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP) registró un alza de 71% en la detención de indocumentados en la frontera, con respecto al mes anterior, con lo que los arrestos tocaron un máximo en 15 años.
El número de menores no acompañados registró un aumento del 100% en un mes, al sumar más de 18.890 niños.
Esta subida generó duras críticas de los republicanos, que señalan que hay una “crisis” en la frontera y acusan al gobierno de Joe Biden de generar un efecto llamada.
El funcionario estadounidense destacó que se logró reducir el número de niños en custodia del CBP desde un máximo de unos 5.500 a finales de marzo a un nivel de entre 600 y 750 menores.
Biden nombró a la vicepresidenta Kamala Harris como encargada de gestionar la creciente llegada de migrantes del Triángulo Norte (Honduras, Guatemala y El Salvador) a la frontera, enfocándose en abordar las causas de raíz del éxodo masivo.
Harris sostendrá una reunión virtual con el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, el viernes y el 7 y 8 de junio se desplazará a México y Guatemala en su primer viaje al exterior desde que ostenta el cargo.