Pasó de ser consejero de Benjamin Netanyahu a ser su rival. Naftali Bennett, líder de la derecha radical, podría suceder a su mentor y convertirse en el próximo primer ministro de Israel.
Calvo y alto, Bennett lidera la formación Yamina, que aboga tanto por el ultraliberalismo económico, como por la línea dura ante Irán y por la anexión de casi dos tercios de la Cisjordania ocupada, lo que brinda a su partido de derecha radical mucha popularidad entre los colonos judíos.
El exempresario, de 49 años, hizo fortuna en el sector de la tecnología y llegó a la política relativamente tarde. Pero desde 2013, este militante del “nacionalismo religioso” ha ocupado cinco carteras ministeriales.
La última, la de Defensa, en 2020, que lo llevó a organizar una gran movilización del ejército para gestionar la crisis provocada por la pandemia de covid-19.
“Una imagen hecha a medida para un público [israelí] que busca desesperadamente un sustituto legítimo para Netanyahu“, apuntó Evan Gottesman, de Israel Policy Forum.
Hace solo dos años se lo daba por muerto políticamente pero, aunque en las legislativas de marzo obtuvo un resultado mediocre, ha sabido jugar sus cartas en las últimas semanas para acabar convirtiéndose en un actor clave de cara a la formación de una coalición gubernamental.
Hasta la fecha, Bennett había alimentado las dudas sobre sus intenciones, sin dejar claro si le daría el golpe final a Netanyahu, en el poder desde 2009. Antes estuvo de 1996 a 1999.
Si el acuerdo de coalición es aprobado por el Parlamento, Naftali Bennett sería el primer jefe de gobierno religioso de la historia del Estado judío que usa una kipá y observa estrictamente el sabbat.
Hijo de inmigrantes estadounidenses, nacido el 25 de marzo de 1972 en Haifa (norte), Bennett se impuso a comienzos de la década de 2000 como uno de los niños mimados de la “start-up nation” gracias a su empresa de ciberseguridad Cyotta, vendida por 145 millones de dólares (casi 122 millones de euros) en 2005, antes de dar el salto hacia la política en el Likud de Netanyahu al año siguiente.
– Comentarios enérgicos –
Dos años más tarde, Bennett abandonó al Likud para dirigir durante un tiempo al Consejo de Yesha, principal grupo de defensa de centenares de miles de colonos israelíes en la Cisjordania ocupada.
En 2012, sorprendió a toda la escena política israelí al tomar el control de la formación de extrema derecha “Hogar Judío”, que sedujo a una parte de los colonos con comentarios enérgicos.
¿Ejemplo? El conflicto con los palestinos no ha podido solucionarse sino que hay que soportarlo como un “disparo de obús en el trasero”. Otro: no hay ocupación israelí en Cisjordania puesto que “nunca existió un Estado palestino”. E incluso: “hay que matar a los terroristas, no liberarlos”, en referencia a los presos palestinos.
Este experto en ciberseguridad, instalado en la próspera ciudad de Raanana (centro de Israel), fue ministro de Defensa (2018-2019), prometiendo a Irán hacer un “Vietnam” si continuaba estableciéndose militarmente en la vecina Siria.