Roger Federer, que cumplirá 40 años el 8 de agosto, anunció este sábado que decidirá después de Wimbledon si irá a los Juegos de Tokio a intentar buscar el oro individual, único gran título que falta en su monumental palmarés.
“Tengo ganas de ir a los Juegos Olímpicos. Pero con mi equipo hemos decidido dejar pasar Wimbledon, sentarnos y decidir qué hacemos”, declaró el suizo sobre la gran cita en Tokio (23 julio-8 agosto).
En su rueda de prensa Federer dijo estar “preparado” para jugar en el Grand Slam sobre hierba, que el suizo buscará conquistar por novena ocasión, lo que significaría un 21º ‘Grande’, rompiendo el empate que tiene con Rafael Nadal.
Diez días después de una derrota sobre la hierba de Halle en 2ª ronda ante Felix Auger-Aliassime, donde ni su juego ni su propia mentalidad le agradaron, el suizo de 39 años afirmó estar listo para su Grand Slam favorito, en el que ostenta el récord de ocho títulos.
En Halle, un torneo que conquistó en diez ocasiones y del que era vigente campeón, “las cosas descarrilaron a nivel mental para mí”, explicó.
“Hay formas de perder y yo me fijé un cierto estándar… La parte buena es que sé que eso no se reproducirá aquí. Estoy preparado, ansioso, listo y sé que puedo hacerlo mucho mejor”, aseguró el N.8 del mundo.
“Ahora estoy en Wimbledon y tengo una posibilidad. Sé que si comienzo bien, si llego a la segunda semana, lo que es mi objetivo inmediato, seré cada vez más fuerte partido tras partido, y creo que todo es posible”, añadió.
Batido al término de una final épica ante Novak Djokovic en 2019 y después de la anulación del torneo el año pasado, Federer aseguró que se “alegra sinceramente” de regresar a Wimbledon “después del año difícil que todos hemos vivido”.
Federer se sometió a una doble artroscopia en su rodilla derecha en 2020, durante la suspensión del circuito por la pandemia.
En Roland Garros alcanzó los octavos, pero abandonó antes del partido para cuidar su rodilla, muy exigida en los largos duelos en tierra batida.