Coqueteando con una reelección en 2024, el expresidente estadounidense Donald Trump se reunirá con sus exultantes seguidores en Ohio la noche del sábado, su primer gran mitin desde que dejó la Casa Blanca, celebrado en apoyo de un candidato republicano al Congreso.
Desterrado de las redes sociales tras difundir noticias falsas y alentar el mortal asalto al Capitolio del 6 de enero, el tribuno ha pronunciado dos importantes discursos públicos desde que abandonó Washington hace cinco meses.
Sin embargo, el ambiente tieso de los salones conservadores no se parecía en nada al ambiente sobreexcitado de sus famosos mítines al aire libre.
En Wellington, cerca de la ciudad industrial de Cleveland, el expresidente republicano aparecerá en el escenario en torno a las 19H00 (23H00 GMT) ante sus seguidores, algunos de los cuales llevan ya varios días acampando en el lugar.
Gorras de Trump, puestos con camisetas y banderas con su imagen: la pequeña ciudad se parece a todos los lugares que visitó el multimillonario durante sus dos campañas presidenciales, en 2016 y 2020.
El exmandatario retomó y ensalzó su famoso slogan: “Make America great again, again!”. (“¡Haz que Estados Unidos vuelva a ser grande otra vez, otra vez!”, y según él, “se esperan grandes multitudes este fin de semana para el mitin”, aunque su equipo no ha revelado el número de entradas distribuidas.
El magnate del sector inmobiliario, de 75 años, aún no ha reconocido explícitamente la victoria de su sucesor, el demócrata Joe Biden. En cambio, sigue clamando un supuesto fraude electoral, a pesar de que sus denuncias han sido rechazadas, incluso por jueces que él mismo nombró.
El sábado, en el escenario, se espera que vuelva a utilizar estas acusaciones infundadas contra las elecciones presidenciales de 2020. El “mayor crimen del siglo”, dijo a principios de junio, en la convención del Partido Republicano de Carolina del Norte.
Inmigración ilegal “en niveles récord”, ciberataques, aumento del precio de la gasolina… Pintó un cuadro calamitoso del comienzo del mandato Biden.
– Aún influyente –
El mitin del sábado se celebra en apoyo de un exasesor de Trump, Max Miller, quien se postula contra un republicano con escaño en la Cámara de Representantes, Anthony González.
Este último, que representa a Ohio, fue uno de los 10 republicanos de la cámara baja -de un total de 211- que votó a favor de la destitución de Trump durante su juicio político por “incitación a la insurrección”
Acusado de haber incitado a sus partidarios a asaltar el Capitolio, donde estaban reunidos los legisladores para certificar la victoria de Joe Biden, el expresidente fue finalmente absuelto en febrero pasado por el Senado, entonces controlado por los republicanos.
Desde entonces, el tempestuoso neoyorquino ha prometido hacer todo lo posible para que sus pocos acusadores republicanos no sean reelegidos.
Expulsado las principales redes sociales Twitter y Facebook tras el atentado al Capitolio, sigue siendo, a pesar de este silencio forzado, muy influyente entre los republicanos.
Y prometió desempeñar un papel importante en el apoyo a los candidatos pro-Trump en las elecciones intermedias de noviembre de 2022.
Pero detrás de esta misión declarada, el multimillonario deja entrever la perspectiva de una nueva candidatura presidencial en 2024.
Para los próximos meses, Trump ya tiene una agenda política bien preparada.
El miércoles viajará a Texas para visitar la zona fronteriza con México y retomar el tema de la inmigración ilegal, uno de los asuntos centrales de su presidencia. Luego, el 3 de julio, celebrará otro gran mitin en Sarasota, Florida.
Para el diputado demócrata Tim Ryan, que representa a Ohio en la Cámara de Representantes, Donald Trump y sus mítines no son una amenaza electoral tan grande.
“Todavía tiene el apoyo de un núcleo duro”, reconoció recientemente en declaraciones a la AFP, pero asegura que “sus seguidores están cada vez más alejados de la vida cotidiana de los ciudadanos de a pie. Y eso puede sentirse”.