Dos colaboradores cercanos del opositor ruso encarcelado Alexéi Navalni fueron objeto este martes de dos nuevas investigaciones criminales por acusaciones de financiación de organizaciones “extremistas”.
El Comité de Investigación Ruso anunció la apertura de causas contra Léonid Volkov e Ivan Zhdánov, dos de los aliados más próximos a Navalni, por “recoger fondos (…) destinados deliberadamente a financiar una organización extremista”, indicó este órgano judicial.
El código penal prevé una pena máxima de ocho años de cárcel por este delito.
El movimiento del disidente encarcelado se enfrenta a presiones sin precedentes en Rusia: sus organizaciones fueron designadas en junio como “extremistas” por la justicia rusa y oficialmente prohibidas en agosto.
Volkov dirigía la red regional de Navalni y Zhdánov estaba al frente del Fondo de Lucha contra la Corrupción (FBK), conocido por sus investigaciones sobre el tren de vida y las malversaciones de las élites rusas.
“Aun entendiendo que estas organizaciones habían sido declaradas extremistas, Volkov y Zhdánov anunciaron que continuarían sus actividades y organizaron una recogida de fondos”, explicó el comunicado judicial.
Volkov, de 40 años, y Zhdánov, de 32, se exiliaron de Rusia hace meses.
“He perdido la cuenta de las investigaciones criminales abiertas contra mi”, comentó Zhdánov en Instagram.
Coincidiendo con esta investigación, un tribunal moscovita rechazó este martes una querella presentada por Navalni contra el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, acusado de atentar contra la dignidad y el honor de Navalni por decir que cooperaba con la CIA.
El tribunal desestimó la querella “sin que Peskov haya presentado ninguna prueba y sin que participara en ninguna audiencia”, denunció en Twitter la abogada de Navalni, Valéria Archinova.
Los aliados de Navalni denuncian que estas acciones judiciales buscan entorpecer a la oposición para las elecciones legislativas de septiembre, a las que el partido gobernante Rusia Unida llega afectado por una creciente impopularidad.