Esta mañana, las autoridades de la Casa Blanca sostuvieron una reunión con los ministros de Relaciones Exteriores y Seguridad de Panamá.
Altas autoridades de los Gobiernos de Panamá y de Estados Unidos sostuvieron este jueves en nuestro país la quinta reunión del Diálogo de Alto Nivel de Seguridad, para dar seguimiento a los programas de seguridad y derechos humanos entre ambos países.
Según informó el Ministerio de Seguridad de Panamá a través de su cuenta oficial de Twiter, los ministros de Relaciones Exteriores, Erika Mouynes y de Seguridad, Juan Pino, participaron en una reunión con el secretario de Seguridad Nacional Alejandro Mayorkas y la subsecretaria de Seguridad Civil, Democracia y Derechos Humanos Uzra Zeya de los Estados Unidos.
“La reunión de alto nivel fue con el objetivo de unir esfuerzos para el fortalecimiento y la cooperación bilateral para enfrentar retos comunes como la migración irregular, el blanqueo de capitales y el financiamiento del terrorismo”, acotó el MINSEG.
Los altos funcionarios de la Casa Blanca y el ministro Pino viajarán mañana viernes a Darién, para ver en el sitio el tema de los migrantes.
Diálogo de Alto Nivel de Seguridad
Según destacó un comunicado de la Cancillería de Panamá, entre los aspectos relevantes de esta reunión, se destaca la preocupación de ambos países por el incremento del paso de migrantes irregulares, agravado por los efectos de los desastres naturales, el cambio climático, la crisis económica y la pandemia del Covid-19. Se hizo énfasis en la ejecución de programas como el intercambio de información de datos biométricos, denominado “fronteras inteligentes”, así como la implementación de planes de prevención en áreas de mayor incidencia delictiva, y de igual forma, la creación de una mesa interinstitucional de cibercrimen y ciberseguridad.
“Ante la migración irregular, reconocido fenómeno internacional, nuestro mayor reto y también nuestra mayor coincidencia es actuar de manera conjunta, reforzando el diálogo político y técnico para prevenir que la población en movilidad continúe expuesta a redes de trata y tráfico de personas. Nuestras acciones deben dirigirnos a tomar decisivas concretas para reducir este fenómeno”, declaró la canciller Erika Mouynes durante el encuentro.
El ministro de Seguridad Pública, Pino, calificó como muy positiva la reunión de alto nivel, destacando los avances logrados por Panamá con el apoyo del gobierno estadounidense, no solo en la lucha contra el crimen organizado y el narcotráfico, sino también en materia de prevención.
Al abordar en la reunión la migración irregular, el ministro indicó que es un tema que Panamá ha llevado con responsabilidad y sentido humanitario, además de un alto costo económico, señalando que en el presente año han pasado más de 107 mil migrantes por el territorio nacional, con una proyección de paso de unos 150 mil migrantes hacia finales de 2021.
Sobre materia de seguridad marítima, en la reunión se resaltaron los esfuerzos para fortalecer los activos navales, aéreos y tecnológicos, herramientas para combatir las redes del crimen organizado transnacional, el narcotráfico y la pesca ilegal.
Por su parte, el Secretario General de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Alejandro Mayorkas, destacó los esfuerzos realizados por Panamá para combatir la delincuencia organizada, el contrabando de armas, la defraudación aduanera, el tráfico de drogas y el blanqueo de capitales, además de la atención que da a los migrantes.
Mayorkas manifestó que estas reuniones bilaterales forman parte del proceso de colaboración mutua que mantienen Estados Unidos y Panamá, con trabajo conjunto mediante iniciativas alineadas para combatir las redes del crimen transnacional, el narcotráfico y otros delitos internacionales.
El mecanismo del Diálogo de Seguridad de Alto Nivel entre Panamá y Estados Unidos busca establecer la cooperación bilateral en materia de seguridad en los próximos cinco años, a fin de coordinar los esfuerzos operativos para combatir la delincuencia y el crimen organizado, a través de iniciativas estratégicas a corto, mediano y largo plazo que mejorarán las capacidades operacionales combinadas de ambos países.