La cumbre se reúne desde ayer domingo y hasta el próximo 12 de noviembre, aunque será hoy lunes cuando más de 120 líderes mundiales se reúnan para dar el impulso político a la cita.
La cumbre del clima COP26 ha abierto ayer domingo sus sesiones formales en la ciudad escocesa de Glasgow (Reino Unido), que lanzarán unas negociaciones trascendentales para mantener vivo el objetivo de limitar el calentamiento global a 1,5ºC.
“Me produce un gran placer declarar abierta la 26 sesión de Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático”, dijo la chilena Carolina Schmidt, presidenta de la COP25 a la hora de dar el relevo de la presidencia al británico Alok Sharma.
La cumbre se reúne desde ayer domingo y hasta el próximo 12 de noviembre, aunque será hoy lunes cuando más de 120 líderes mundiales se reúnan para dar el impulso político a la cita.
Nada más declarar inaugurada la conferencia, Schmidt pidió un minuto de silencio por los fallecidos a causa de la pandemia de la covid-19, que obligó a aplazar un año la celebración de la COP26.
Y casi al mismo tiempo que se abría la cumbre en Glasgow, llegó desde Roma la noticia de que los líderes del G20 han acordado mantener el techo del calentamiento global en 1,5 grados y emprender acciones para ello, que supone precisamente el gran desafío de la COP26.
La presidenta saliente se dirigió en su discurso a los responsables de ese grupo de países para instarles a que “cumplan los acuerdos firmados”.
“Sabemos que enfrentar el cambio climático requiere de una transformación transversal de nuestro desarrollo”, subrayó Schmidt en su discurso a los delegados que representarán a sus países en la ciudad británica.
“No podemos reescribir el Acuerdo de París, tenemos que cumplirlo”, añadió la chilena, en referencia al histórico pacto suscrito en 2015 por el que las naciones se comprometieron a mantener el aumento de la temperatura global en este siglo por debajo de los 2 grados centígrados por encima de los niveles preindustriales, y proseguir los esfuerzos para limitar aún más ese incremento a 1,5ºC.
La sesión inaugural de la cumbre dio paso al comienzo de las negociaciones a puerta cerrada, que se celebrarán durante dos semanas en paralelo a centenares de actos y anuncios sobre iniciativas dirigidas a combatir el cambio climático y salvaguardar la naturaleza.