Un foro virtual organizado por el BID y STRI, exploró los retos y oportunidades de Panamá para lograr una gestión sostenible de sus recursos marinos que estimule el desarrollo económico, sostenga los medios de vida y preserve la biodiversidad.
El martes pasado, el Banco Interamericano de Desarrollo en conjunto con el Instituto Smithsonian de Investigaciones Tropicales (STRI) realizaron el foro virtual “Hacia la Economía Azul Sostenible en Panamá: Retos y Oportunidades”, con el apoyo del Ministerio de Ambiente, la Cámara Marítima de Panamá y la Autoridad de Recursos Acuáticos de Panamá (ARAP).
“La economía azul relaciona el uso, la gestión y la conservación sostenible de los recursos marinos a través de actividades que propician el desarrollo económico y la mejora de los medios de vida, a la vez que preservan la riqueza de la biodiversidad. Sus modelos -innovadores y tecnológicos- pueden ofrecer soluciones para satisfacer un incremento responsable del consumo de manera sostenible y de forma resiliente al clima, manteniendo una armonización restauradora, regenerativa y resiliente en términos económicos, ambientales y sociales”, explicó Gonzalo Rivas, jefe de la División de Competitividad, Tecnología e Innovación en el Banco Interamericano de Desarrollo.
“Panamá mira hacia el mar, para el turismo, la pesca, el transporte marítimo, la protección de la infraestructura, mucho más, y un futuro marino sostenible será fundamental para una próspera economía panameña en el futuro. Y es justo decir que el futuro de la economía azul de Panamá seguirá dependiendo de las conexiones profundas entre la ciencia y las políticas públicas y la ciencia de STRI debe continuar respaldando las decisiones que tenemos por delante”, destacó el director de STRI, Joshua Tewksbury, en sus palabras de bienvenida.
El evento contó con la participación del vocero internacional Michael B. Jones, presidente de TMA BlueTech, una asociación industrial sin fines de lucro que promueve industrias marinas sostenibles basadas en la ciencia, quien profundizó sobre el concepto de Economía Azul y presentó iniciativas de éxito que pueden ser replicables para Panamá.
Adicionalmente, expertos del sector público y privado brindaron su visión respecto a una política de la Economía Azul para Panamá. Eustorgio Jaén, jefe del departamento de Economía Ambiental de la dirección de Política Ambiental de MiAmbiente presentó sobre los instrumentos de gestión ambiental de recursos marino-costeros en Panamá que se encuentran en proceso de aprobación, como la política nacional de océanos y el plan de acción nacional de basura marina.
Darío López, director nacional de investigación y desarrollo de la Autoridad de los Recursos Acuáticos de Panamá, expuso algunos de los principales problemas que debe enfrentar el país para lograr una Economía Azul. Por su parte, René Gómez, de la Cámara Marítima de Panamá, presentó sobre las ventajas y estrategias para la implementación del turismo sostenible o azul en Panamá.
En representación de STRI, el biólogo marino Héctor Guzmán brindó una ponencia titulada “¿Cómo sería la economía azul panameña sin ballenas?”, en la que destacó el papel ecológico que juegan las ballenas en la productividad de los océanos y en su capacidad para secuestrar carbono.
“Las ballenas son como tener un gran navío capturando carbono conforme se mueven por los océanos. Tienen la capacidad de acumular más de 33 toneladas de dióxido de carbono en 60 años que es el promedio de vida de una ballena”, resaltó Guzmán.
Y respecto a este punto agregó: “Economistas del Fondo Monetario Internacional nos han dicho que cada ballena podría tener un valor de 2 millones de dólares.”
“La actividad en mares y océanos tiene una alta relevancia para países como Panamá, con extensas costas, y puede ser un motor que apoye la recuperación de los países luego de la crisis, pero es importante promover un diálogo que involucre al sector público, sector privado y academia para trazar en conjunto una hoja de ruta que permita maximizar su potencial de manera responsable y sostenible. Este encuentro es el inicio de un importante diálogo sobre el futuro de la economía azul en Panamá”, apuntó Rocío Medina Bolívar, Representante del Grupo BID en Panamá.