Estados Unidos refuerza su arsenal de lucha contra el narcotráfico apuntando a personas y organizaciones de China, Brasil, Colombia y México, anunció el miércoles el gobierno de Joe Biden, cuando el país acaba de registrar un récord de muertes por sobredosis.
Entre los sancionados se incluyen personas que trafican con fentanilo y sus precursores químicos, metanfetamina, cocaína y heroína, así como organizaciones que Washington considera una amenaza para Estados Unidos.
“El presidente Biden toma medidas decisivas para detectar, desbaratar y reducir el poder de las organizaciones criminales transnacionales y proteger al pueblo estadounidense” a través de dos decretos sobre el crimen organizado transnacional y las drogas, según un documento transmitido por funcionarios de su gobierno.
Uno de estos decretos establece un nuevo organismo, el Consejo de Estados Unidos sobre el Crimen Organizado Transnacional (USCTOC, por sus siglas en inglés) que estará integrado por representantes de distintos organismos gubernamentales.
El otro decreto impone un régimen de sanciones más amplias contra los actores internacionales del narcotráfico, a los que se les podrá congelar sus activos en Estados Unidos.
En virtud de este nuevo régimen de sanciones, el Departamento del Tesoro anunció el miércoles 25 objetivos (10 personas y 15 grupos) entre los que figuran algunos nuevos, como la organización brasileña Primeiro Comando Da Capital, y los mexicanos Los Rojos DTO y Guerreros Unidos, así como cuatro sociedades y un narcotraficante chino. Además incluye a 17 personas y entidades previamente sancionadas, entre ellos mexicanos y colombianos.