Primeramente, se debe identificar las necesidades y preguntar lo que necesita saber sobre las características y los costos de los productos/servicios.
En la época de fin de año muchos microempresarios y microempresarias aprovechan para planificar las metas de sus negocios, sin embargo, no siempre cuentan con el dinero suficiente para poner en marcha planes de expansión o compra de insumos.
Los créditos pueden ser una buena opción para cumplir con los objetivos y potenciar sus microempresas en el nuevo año. Sin embargo, tienen que tener en cuenta varias recomendaciones para mantener una buena salud financiera.
Y es que el financiamiento puede ser considerado como un motor para el impulso de las microempresas, esto le ayuda a los microempresarios a estabilizar el flujo de efectivo en sus negocios, contar con mayor capacidad de inversión y tener acceso a productos financieros que agreguen valor a su vida personal o la de su actividad comercial.
Según explicó, Clemente Castillo, gerente de la Red Comercial de Microserfin explicó que “toda persona que ha tomado la decisión de empezar a gestionar financiamiento para su negocio, como primer paso debe acudir a las entidades para recibir información o educación financiera; identificar cuáles son las necesidades del negocio y preguntar lo que necesita saber sobre las características y los costos de los productos/servicios que pueden ayudar a atender esa necesidad; y por último, prestar mucha atención a las recomendaciones que le haga la entidad sobre el uso del producto o servicio adquirido”.
¿Por dónde empezar?
Antes de pensar en buscar algún tipo de solución financiera para iniciar una vida crediticia, se debe establecer un propósito que impacte positivamente al negocio del microempresario. Por ello se debe conocer las principales razones para solicitar un préstamo:
- Inversión: Como un respaldo que ayuda a la empresa a continuar con su crecimiento y expansión, para lograr sus objetivos a corto, mediano o largo plazo.
- Solucionar una emergencia: con financiamiento se puede hacer frente a gastos o inversiones de imprevisto que surjan en el negocio.
- Consumo o compra de algún artículo para el que no se tenga el dinero suficiente en el momento: El financiamiento se puede utilizar para múltiples proyectos; uno de ellos para la compra de activos fijos que necesite el negocio a fin de seguir operando.
¿Cómo gestionar los créditos?
Una vez se cuenta con financiamiento es importante seguir algunos consejos para mantener una buena salud financiera y un buen historial de crédito que abrirá las puertas hacia oportunidades de financiamiento futuras. A continuación, las recomendaciones:
- La deuda no debe impedir pagar gastos básicos, tales como comida, escuela y otros gastos necesarios.
- Se debe llevar la cuenta de la cantidad y la frecuencia de los pagos pendientes de los préstamos.
- El total de los pagos de los préstamos no debe exceder el 50% del dinero disponible durante un período.
- Es importante limitar el préstamo a inversiones que generen más ingresos para la familia.
- Si el préstamo se demorará en generar nuevos ingresos, hay que diseñar un plan para realizar los pagos a pesar de ello, a fin de evitar que las letras se acumulen y pongan en riesgo la estabilidad económica.
Castillo agregó que “Para algunos microempresarios puede resultar difícil iniciar una vida crediticia si no han tenido acceso a servicios financieros, producto de la informalidad o falta de documentación requerida en la banca tradicional o porque su actividad no genera grandes flujos de ingresos. No obstante, existen entidades financieras como la nuestra en Microserfin que atienden a pequeñas y medianas empresas con productos a su medida. En nuestro caso brindamos tanto créditos como educación financiera a través de nuestro programa Saquemos Cuentas para que puedan tomar decisiones responsables e informadas y tengan el acompañamiento que necesitan en la construcción de su vida crediticia”.