El llamado surgió tras conocerse el caso de un privado de libertad que tenía más de dos meses esposado, en condiciones de insalubridad.
La Defensoría del Pueblo recomendó al Sistema Penitenciario la búsqueda de espacios físicos adecuados, la contratación de médicos psiquiatras y la agilización de compras de medicamentos para la atención de personas privadas de libertad con trastornos psiquiátricos en cárceles del país.
En una nota de prensa, la entidad regente de los Derechos Humanos acusó al Sistema Penitenciario de no contar con las condiciones mínimas para albergar a detenidos en esta condición.
Acotó que el pasado 7 de febrero, personal del Mecanismo Nacional para la Prevención de la Tortura (MNPT) observó el caso de una persona privada de libertad que padece de trastornos psiquiátricos, esposada y con grilletes en la mano, desde hace más de dos meses, en la sala de seguridad interna del centro, en condiciones de insalubridad y con iluminación artificial permanente.
Añade el informe del MNPT que el privado de libertad no tiene las condiciones mínimas para realizar sus necesidades fisiológicas e higiene personal pues las realizaba en bolsas o “cartuchos” y a la intemperie; además sin ropa de cama ni colchón, pernoctaba en la banca del recinto en el que se encuentra, al momento de la visita, no contaba con los medicamentos antipsicóticos; pero mediante gestión del MNPT se obtuvo los medicamentos en coordinación con el Centro de Salud de Pacora y se logró la reanudación de atención psiquiátrica de la persona privada de libertad.
Esto es contrario a las reglas mínimas de las Naciones Unidas para el Tratamiento de los Reclusos o Reglas Nelson Mandela y a los Principios y Buenas Prácticas sobre la Protección de las Personas Privadas de Libertad en las Américas, además de lo dispuesto en la Ley N° 55 de 2003 que reorganiza el Sistema Penitenciario, refiere el documento.
Agregó que como entidad rectora de los Derechos Humanos en Panamá recomienda al Centro Penitenciario La Joya, la búsqueda de un espacio físico con condiciones mínimas para albergar a las personas privadas de libertad con este tipo de enfermedades.
A su vez, que la Dirección General de Sistema Penitenciario contrate un médico psiquiatra y realice la vigilancia periódica para garantizar el cumplimiento de los estándares de privación de libertad dentro de sus centros penitenciarios para no incurrir en actos conducentes de tratos crueles, inhumanos o degradantes; mientras que al Ministerio de Salud se le sugirió agilizar las políticas de compra de medicamentos.