Vladimir Putin exigió este lunes el reconocimiento de Crimea como territorio ruso y la desmilitarización y “desnazificación” de Ucrania como condiciones para poner fin a la invasión lanzada por Moscú, que tuvo su primera negociación cara a cara con Kiev desde el inicio del conflicto.
A pesar de estas discusiones, los bombardeos contra diferentes ciudades de Ucrania continuaron en el quinto día de la ofensiva rusa. En Járkov, la segunda urbe del país, al menos 11 personas murieron en ataques contra barrios residenciales, según su gobernador.
Las delegaciones de Moscú y Kiev estuvieron reunidas durante varias horas en la región de Gómel, en Bielorrusia, cerca de la frontera con Ucrania, y regresaron luego a sus capitales para consultas, señaló el jefe negociador ucraniano, Mikhailo Podoliak.
“Las partes establecieron una serie de prioridades y cuestiones que requieren algunas decisiones”, dijo Podoliak, mientras que su homólogo ruso, Vladimir Medinski, indicó que la nueva reunión tendrá lugar “pronto” en la frontera entre Polonia y Bielorrusia.
La invasión lanzada por Putin el jueves desató una cascada de sanciones de los países occidentales y sus aliados que incluyen bloqueos al acceso al sistema financiero, pero también un cierre del espacio aéreo para los aviones rusos. Muchos países ofrecieron armas a Ucrania, incluyendo a Finlandia, pero insistieron en que no se involucrarán militarmente.
Ucrania exige un alto al fuego y la retirada de las tropas rusas y el presidente Volodimir Zelenski, en redes sociales, urgió a los invasores que “depongan las armas” y “salven sus vidas”.
Zelenski también pidió a la Unión Europea (UE) que admita inmediatamente a su país en el bloque, pero en Bruselas “hay diferentes opiniones” al respecto, respondió el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel.
De su lado, Putin exigió este lunes a su homólogo francés, Emmanuel Macron, el reconocimiento de la península de Crimea que anexó en 2014 como territorio ruso y la desmilitarización y “desnazificación” de Ucrania como condiciones preliminares a una resolución del conflicto, indicó el Kremlin tras una conversación telefónica entre ambos mandatarios.
El mandatario ruso subrayó que la resolución del conflicto “era posible solo si los intereses de seguridad legítimos de Rusia eran tomados en cuenta sin condición”, según el Kremlin.
Tanto las conversaciones como el conflicto en el terreno están marcado por la amenaza lanzada el domingo por Putin, que ordenó la puesta en alerta máxima de las fuerzas de disuasión nuclear.
– Sin victoria contundente –
En el terreno, los ucranianos parecen aumentar su resistencia frente a los rusos, que todavía no logran anunciar ninguna victoria contundente.
El lunes, las autoridades ucranianas afirmaron que repelieron varios asaltos contra Kiev, en donde el toque de queda se levantó la mañana del lunes.
En la ciudad se formaron largas colas fuera de los supermercados, donde la población mostraba agotamiento y turbación. En las calles brigadas de voluntarios con lazos amarillos y azules con los colores nacionales levantaron barricadas improvisadas.
“Los rusos saben muy bien que nuestra tierra les quema bajo los pies”, afirmó a la AFP Pavlo Krasnopruov, un actor que hoy está listo para combatir.
El ejército ruso afirmó que los civiles podían irse “libremente” de Kiev y acusó al gobierno ucraniano de utilizarlos como “escudos humanos”.
La invasión rusa se torna “cada vez más brutal”, afirmó este lunes Borrell. “Las fuerzas ucranianas responden con coraje. Kiev resiste, así como Mariúpol y Járkov”, dijo Borrell. Macron pidió a Putin que evite atacar civiles.
“El enemigo ruso bombardea barrios residenciales”, escribió el gobernador regional de Járkov, Oleg Sinegubov, en las redes sociales. Lo que está pasando en este momento en Járkov ¡es un crimen de guerra!”, agregó.
Un fotógrafo de la AFP vio soldados rusos muertos ante una escuela en ruinas, no lejos del centro de esta ciudad de 1,4 millones de habitantes.
La presidencia ucraniana afirmó que la ciudad de Berdiansk, en el mar de Azov, está “ocupada” y el ejército ruso afirmó que tiene rodeada a la localidad de Jersón, más al oeste del país.
Ambas ciudades están cerca de la península de Crimea, que Rusia anexó en 2014 y desde la cual lanzó una de sus varias fuerzas de invasión.
El balance del conflicto sigue siendo incierto y Ucrania informó de 200 civiles y decenas de militares muertes desde el jueves, incluyendo a 16 niños.
Por su parte la ONU registró 102 civiles muertos, incluyendo a 7 niños y a 304 heridos, pero advirtió que las cifras reales pueden ser “considerablemente” más altas.
Putin afirma que las acciones de sus tropas e justifican para defender a los separatistas prorrusos en el este de Ucrania. Los rebeldes han enfrentado al gobierno ucraniano por ocho años, en un conflicto que ha cobrado 14.000 vidas.
– Nuevas sanciones –
Cada vez más países adoptan sanciones contra Moscú. Este lunes, Suiza indicó que adoptaba de manera “completa” las medidas decididas por la UE y Japón anunció sanciones contra el presidente de Bielorrusia y el banco central de Rusia.
El Reino Unido ordenó que se prohíba el acceso a los puertos del Reino Unido a los buques con bandera rusa y congelará los activos de todos los bancos rusos en su territorio “en los próximos días”, una medida que refuerza sus sanciones hacia el sector financiero de ese país, informó el gobierno.
Este vendaval de medidas sin precedentes contra Moscú provocó una debacle en los mercados rusos y el rublo se depreció con fuerza, obligando a suspender los intercambios. Para sostener la economía nacional, el Banco Central de Rusia subió 9,5 puntos hasta un 20% la tasa directriz.
Rusia anunció además que prohíbe a sus residentes transferir divisas al extranjero y que sus exportadores deberán a convertir el 80% de sus ingresos en rublos.
Además, como respuesta a parte de las medidas occidentales, Moscú restringió los vuelos de compañías aéreas de 36 países que habían cerrado su espacio aéreo a los aviones rusos.
En medio de esta situación cada vez más compleja y tensa, el Departamento de Estado estadounidense recomendó a sus ciudadanos abandonar Rusia “inmediatamente”.
En el ámbito de las instituciones internacionales, la Asamblea General de la ONU inició este lunes con un minuto de silencio en memoria de las víctimas de la invasión una sesión de emergencia para discutir el conflicto.
En Ginebra, el Consejo de Derechos Humanos de la ONU aprobó este lunes la celebración de un debate urgente el jueves, a petición de Kiev y apoyado por una amplia coalición de países. El canciller ruso Serguéi Lavrov anuló el viaje que tenía planeado a Suiza para participar en ese encuentro.
La presión sobre Rusia abarca todos los frentes. Este lunes la FIFA anunció su exclusión del Mundial de fútbol.
– Un masivo éxodo –
En tanto, el éxodo de refugiados continúa y según la agencia de la ONU para los refugiados ACNUR, desde el jueves cerca de 500.000 personas huyeron hacia los países vecinos. La UE espera que este conflicto deje siete millones de desplazados.
La mayoría de los refugiados partieron hacia Polonia, donde hay una importante comunidad de inmigrantes ucranianos, pero también llegaron a Rumania, Eslovaquia y Hungría.