Rusia reconoció el viernes que 1.351 soldados de sus filas murieron desde el inicio de su ofensiva militar en Ucrania hace un mes, y acusó a los países occidentales de cometer un “error” al entregar armas a Kiev.
“Durante la operación militar especial, 1.351 militares murieron y 3.825 resultaron heridos”, declaró el jefe de Estado Mayor adjunto del ejército, Serguéi Rudskoy, en rueda de prensa.
Además, Rusia ha recibido 419.736 refugiados de Ucrania desde el inicio de la operación, según Mijail Mizintsev, director del Centro Nacional de Gestión de la Defensa de Rusia.