El presidente ucraniano Volodimir Zelenski dijo el lunes que espera obtener para su país “en unas semanas” el estatuto de candidato a adherir a la Unión Europea (UE), y agradeció a Bruselas por la rapidez del proceso.
En un encuentro en Kiev, Zelenski transmitió al embajador de la UE en Ucrania, Matti Maasikas, dos voluminosos expedientes que contienen la demanda de adhesión de Ucrania a la Unión Europea.
“Nuestro pueblo, en su interior, en su alma, está ya mentalmente en Europa desde hace tiempo. Pese a todo, cada país debe cumplir ese procedimiento”, afirmó.
“Es un honor recibir” de Zelenski las respuestas al cuestionario de la Comisión Europea, anunció en Twitter Matti Maasikas.
El cuestionario le fue entregado a Zelenski por la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, hace unos diez días.
“Una nueva etapa en el camino de Ucrania hacia la UE”, subrayó Maasikas. “Tiempos extraordinarios requieren medidas extraordinarias y una velocidad extraordinaria”, agregó.
Habitualmente, la obtención del estatuto de candidato a la UE “toma años”, pero Bruselas “nos dio verdaderamente la oportunidad de efectuar este procedimiento en unas semanas o meses”, dijo Zelenski.
Según Zelenski, “el pueblo de Ucrania está unido en este objetivo: sentirse en términos de igualdad con Europa, hacer parte de la Unión Europea”.
La integración a la UE es un proceso de largo aliento para acercar la legislación del país al derecho europeo.
Requiere negociaciones complejas sobre muchos temas y criterios difíciles de respetar por un país en guerra, como la estabilidad política y una economía de mercado viable.
Se necesita también el acuerdo unánime de los 27 países miembros de la UE y estos se encuentran divididos sobre el tema de una posible adhesión de Ucrania.
Ocho países, República Checa, Letonia, Lituania, Estonia, Bulgaria, Polonia, Eslovaquia y Eslovenia, llamaron, en carta abierta, a iniciar las negociaciones para una adhesión de Ucrania.
Pero una tercera parte de los Estados miembros, entre ellos Bélgica, Países Bajos, Italia o España, son más “reservados” en el tema, según una fuente diplomática contactada por la AFP.