El embajador de la Unión Europea (UE) en Brasil, Ignacio Ybáñez, animó este viernes a Latinoamérica a reforzar la cooperación y “estar mejor dotados” en el área de Defensa, y recalcó la necesidad de que la región se mantenga del lado de la “legalidad internacional” frente a la invasión de Rusia a Ucrania.
“Queremos insistir ante los países de Latinoamérica que no es aceptable” la “agresión” rusa y que “ellos mismos, en su propio interés, tienen que ayudarnos a restablecer la legalidad internacional”, afirmó Ybáñez en una entrevista telemática con Efe.
El embajador participó en la XIX Conferencia de Seguridad Internacional del Fuerte de Copacabana, que estos dos últimos días reunió en Río de Janeiro a expertos europeos y americanos en torno al tema “Amenazas sin fronteras: ¿Somos capaces de lidiar con los desafíos?”.
En un contexto en el que Occidente aumenta su gasto en Defensa, Ybáñez cree que sería positivo un “esfuerzo” de los países de Latinoamérica “para estar mejor dotados” y un “refuerzo de la cooperación internacional, que es el complemento perfecto para ese esfuerzo militar”.
“Todo el mundo preferiría destinar el dinero que se dedica a la Defensa a otras urgencias económicas y sociales, eso es obvio, pero también es obvio, y lo hemos visto en otras situaciones, que si no estás preparado, hay otros, en este caso Rusia, que sí han hecho ese esfuerzo por estar bien dotados desde el punto de vista militar”, puntualizó.
Ante esto, consideró que “la mejor defensa es contar con medios suficientes para que el posible agresor no te ataque”.
“Nosotros les tendemos la mano a los países de América Latina para decir que coincidimos en los valores que defendemos, en la visión que tenemos de la comunidad internacional y, por lo tanto, para que sigamos siendo socios en estas situaciones complicadas”, añadió.
Ybáñez subrayó que la ofensiva militar del Gobierno de Vladímir Putin no solo tiene impactos en Europa, sino en el “mundo entero”, y que “el origen de todos los problemas es Rusia”.
“No es verdad que las sanciones que hemos impuesto a Rusia para intentar que cambie de posición tienen efecto sobre la crisis energética y la crisis alimentaria”, manifestó.
En este sentido, aclaró que esas sanciones “no están dirigidas a las producciones agrícolas” y están “muy enfocadas a unos objetivos concretos”, en respuesta a las preocupaciones transmitidas por algunos países de la región, como Brasil y Argentina, sobre los impactos, por ejemplo, en la importación de fertilizantes.
ACUERDO UE-MERCOSUR COBRA MÁS IMPORTANCIA
Asimismo, señaló que el acuerdo entre la UE y el Mercosur (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay), pendiente aún de ratificación, cobra ahora “mucha más” importancia, tras la “agresión de Rusia” a Ucrania.
Por ello, cree que sería “muy bueno” finalizar el proceso y ser “capaces de avanzar”, aunque sin rebajar los estándares del bloque europeo en determinadas áreas, como la medioambiental.
Sobre este asunto, expresó su “preocupación” sobre los datos de deforestación en la Amazonía brasileña, que se han disparado durante el Gobierno del presidente Jair Bolsonaro.
“Lo que le pedimos a Brasil es que convierta esos compromisos políticos -como acabar con la deforestación ilegal en la Amazonía hasta 2028- en hechos concretos y en eso por ahora estamos muy lejos”, demandó Ybáñez.
El embajador ofreció la cooperación de la UE para frenar la tala ilegal en la selva tropical porque son conscientes de que es un “desafío complicado” debido a que es una región empobrecida, lo que pone de relieve “la necesidad de presencia pública”.
En este marco, mencionó la desaparición y el asesinato en una zona remota de la Amazonía brasileña, del experto indigenista Bruno Pereira y el periodista británico Dom Phillips, cuyos cuerpos sólo fueron hallados días después tras la confesión de un pescador furtivo.
Un caso, según él, “especialmente llamativo” que “demuestra que la situación, si no esta fuera de control, es preocupante”.
Por ello, cree que la ratificación del acuerdo UE-Mercosur daría al bloque europeo “una posición de más fuerza” que la actual para “dialogar y conseguir que Brasil vaya cumpliendo sus compromisos” ecológicos.