Desde campanas hasta animales de cartón, pasando por nieve artificial y una réplica de jengibre de la misma Casa Blanca, el edificio presidencial dio el pistoletazo de salida a la temporada navideña con su tradicional engalanamiento anual.
La primera dama de Estados Unidos, Jill Biden, inauguró este lunes la decoración de la Casa Blanca para estas Navidades, que tiene como lema “We the People” (“Nosotros, el pueblo”, en español) y ha adornado el edificio presidencial con 77 abetos y más de 83.000 luces.
Distintas salas se vistieron para la ocasión con una decoración en la que 150 voluntarios trabajaron una semana y que pretende “captar el espíritu encarnado en la idea misma de Estados Unidos”.
Desde campanas hasta animales de cartón, pasando por nieve artificial y una réplica de jengibre de la misma Casa Blanca, el edificio presidencial dio el pistoletazo de salida a la temporada navideña con su tradicional engalanamiento anual.
Jill Biden escogió “We the People” como lema haciendo alusión al preámbulo de la Constitución estadounidense, que empieza de la misma manera.
La primera dama quiso dedicar esta edición especialmente a las familias de la Guardia Nacional de Estados Unidos para “dar apoyo” a aquellos que “representan el corazón” de las comunidades, por lo que invitó a miembros y familiares a dar la bienvenida a las fiestas.
“Hay que reconocer su servicio y hacerles saber que no están solos”, reivindicó la esposa de Joe Biden, quien como madre y abuela de miembros de la Guardia Nacional incidió en la labor de esas fuerzas, que “a menudo pasa desapercibida”.
Entre los adornos no faltó la tradicional casa de jengibre que elaboran los estadounidenses, en la que se han invertido más de 13 kilogramos de chocolate y 18 de glaseado real.
Siguiendo el eslogan de este año, una réplica de galleta del Salón de la Independencia de Filadelfia también preside el comedor, rebautizado “We the Children” (“Nosotros, los niños”) y dedicado a los pequeños protagonistas de las festividades.
La primera dama animó a “ver la Navidad desde los ojos de los niños” y especialmente se refirió a los hijos de miembros de la Guardia Nacional, con quienes conversó por la mañana para conocer sus historias y aprender “cómo darles un mejor apoyo”.
Asimismo, tanto Willow como Commander, los perros de la familia Biden, aparecen en alguna que otra sala en formato cartón, mientras que otras figuras de animales como las de los pájaros oficiales de los 57 estados, territorios y el Distrito de Columbia cuelgan del gran árbol de la “Habitación azul”.
A la decoración se le suma la música de la orquesta que acompaña al presidente cuando recibe invitados, como en cenas de Estado y firmas de proyectos de ley.
Canciones navideñas como “Sleigh Ride” y la “Danza del Hada de Azúcar” del “ballet” del Cascanueces son las más deseadas por los asistentes, confesó el director de la Banda de Marines de Estados Unidos, Jason Fettig, a EFE, quien lleva dos semanas preparando el repertorio.
Aún con 25 eventos más en la agenda, la orquesta presidencial amenizará la decoración de Navidad para todos aquellos que visiten la Casa Blanca este diciembre.
La secretaria de prensa de la Oficina de la primera dama, Vanessa Valdivia, aseguró a EFE que esperan que unas 50.000 personas recorran estas salas.