Fonda acompañará a Richar Lugner, un constructor austríaco de 90 años que cada febrero paga para que un famoso sea su acompañante en este evento social, el más importante de Austria.
La actriz Jane Fonda ha asegurado hoy que ha aceptado acompañar mañana a un rico constructor austríaco al Baile de la Ópera de Viena porque la paga es buena y le hacen falta esos ingresos.
“Me pagan bien y necesito el dinero”, dijo hoy en una rueda de prensa en Viena Fonda, de 85 años, ganadora del Óscar en dos ocasiones (Klute, 1972 y Coming Home, 1979).
La actriz y activista en la defensa del medioambiente reconoció que hasta ayer mismo pensaba que la invitación de acudir a Viena consistía en asistir a una función de ópera.
Fonda acompañará a Richar Lugner, un constructor austríaco de 90 años que cada febrero paga para que un famoso sea su acompañante en este evento social, el más importante de Austria.
“Quizás visite al presidente (de Austria), daré entrevistas, veré bailar a la gente y luego me iré a dormir”, señaló la actriz sobre sus planes para el llamado baile de los bailes, que se celebra mañana por primera vez tras dos años de pausa debido a la pandemia de covid-19.
Eso sí, aseguró que no se atreverá a probar a bailar un vals debido a que tiene las caderas y las rodillas “equivocadas”, informa la agencia APA.
El pasado diciembre, Fonda anunció que el cáncer que padecía está en remisión.
Fonda lleva años siendo muy activa en la defensa del medioambiente, participando en numerosas protestas y manifestaciones en las que incluso ha llegado a ser arrestada.
También hoy pidió más protección para el clima y defendió las acciones de protesta del grupo “Última Generación”, que en Austria han, por ejemplo, arrojado un líquido negro contra un cuadro de Klimt, que no resultó llamado, o intentado interrumpir el famoso Concierto de Año Nuevo.
Lugner lleva años contratando a una estrella del cine, la música o la moda para que le acompañe al Baile de la Ópera.
En 2019 estuvo acompañado por la modelo Elle Macpherson y en 2018 por la actriz estadounidense Melanie Griffith.
Antes de ella, el empresario invitó a personalidades como Kim Kardashian (2014), Pamela Anderson (2003), Gina Lollobrigida (1991 y 2013), Ivana Trump (1994) o Sophia Loren (1995).